Lo primero, agradecezco de todo corazón los comentarios de bienvenida y las muestras de cariño, que por cierto, es mi mejor combustible; a palos voy más lento. El biodiesel me repite y está por las nubes.

Por petición expresa de VAMOAVER, hoy no incluyo video, toca leer. Atenderé las peticiones poco a poco, en la medida de lo imposible que es contentar a todos.

Anuncio que mañana estrenaré una serie en el blog, lleva por título La vida en una balda>>

Al lío. A ver si entre todos logramos arrojar algo de luz a este misterio que no deja dormir a Europa desde hace días. El misterio de los mamuts. Según nos cuentan los expertos estos animales se extinguieron hace 3.700 años aprox., más o menos por el Antiguo Testamento. Hay quien sostiene que sufrieron una caza indiscriminada a manos y lanzas de nuestros yayos prehistóricos, luego están los teóricos “glaciacionistas”, y los del meteorito que hizo diana porque no estaba Bruce Willis de retén. Bien, lo cierto es que si hubiera un mamut vivo ya estaría grabado y colgado en el Youtube. Que quedan mamuts, es un hecho. Pero decir que se extinguieron, así a la ligera, ¿no es un poco fuerte? Yo nunca se lo oí decir a Félix Rodríguez de la Fuente, y por algo sería, que ese hombre era el que más sabía de estos temas de pelo y pluma; y el Cousteau también, cuando la cosa se encharcaba era el jefe.

Porque, digo yo, ¿de dónde narices han salido los elefantes? ¿Del mono como nosotros? A mi no me cuadra el paso de mono a elefante, hay que hacer mucha pirueta genética para defenderlo en un congreso. De una mosca tampoco, vamos, que el asunto canta bastante; los elefantes son mamuts depilados y punto.

La evolución de las especies marca una tendencia evidente: el pelo sobra. Nuestros tatos de cromañón tenían pelo hasta en lo blanco del ojo, hoy eso es impensable. Sí que quedan, todavía, algunos mechones de oreja y varias espaldas-alfombra por ahí sueltas, pero el futuro es lampiño, amigos. En pocos años, las mujeres nacerán ya con las ingles brasileñas, al tiempo. En portugal costará un poco más, también hay que decirlo. Mira que hay sobacos grandes en Portugal, madre mía. Normal que sean especialistas en toallas, es que hay que secar esas madejas. Un corte a tijera en una peluquería de Lisboa, solo está al alcance de un brazo a lo Popeye.

Es por eso que creo que los mamuts nunca se extinguieron, se fueron quedando sin pelo poco a poco, como nosotros los humanos, y ahora los conocemos como elefantes. Sí, Dumbo es un mamut metrosexual, para qué ocultarlo más tiempo.

Y no nos vamos a meter en el farragoso tema de los mamíferos marinos, que hay también tengo mis dudas. ¿Alguien ha visto las tetillas a un delfín hembra?

> Próximamente en sus pantallas.

Mañana más, un abrazo para todos.