El presunto intento de suicidio de la cantante irlandesa Sinead O’Connor y su rescate por parte de la Policía gracias a que lo anunció por Facebook puede ser una buena escusa para recuperar una entrada pretérita sobre su canción estrella, la única que ha soportado el paso del tiempo.

Preciosa balada, sin duda. Grandiosamente interpretado por la increíble paleta de colores de la voz de Sinead O’Connor, este tema escrito por el polifacético artista norteamericano Prince llegó al número uno en medio mundo allá por 1989.

Vendió millones de copias y recibió varios discos de platino, además de sumar cuatro nominaciones a los Grammy, ganando el de mejor álbum de música alternativa. Sin embargo, Sinead se negó a aceptar el premio argumentando que le fue concedido por su éxito material. «Los Grammy se dan al disco que más ha vendido, pero no al mejor artísticamente hablando. No me interesan. No quiero tomar parte en nada que anime a la gente a creer que el éxito material es importante, especialmente si eso representa que te has de sacrificar personalmente para obtenerlo», dijo.

‘Nothing compares to you’ sacó del anonimato y catapultó a la pasional cantante irlandesa hasta la élite de las intérpretes melódicas de su generación. No ocurrió lo mismo a mediados de los ochenta con el grupo funk The Family, el personal de Prince. La grabaron sin conseguir ninguna repercusión. No obstante, el éxito de la irlandesa fue de tal tamaño que hasta la propia estrella estadounidense la recuperó para sus conciertos. Su composición estaba dedicada a la actriz Susannah Melvoin.

Con una lágrima en la mejilla, Sinead nos dijo que nada es comparable a ti. A ti que te has ido, a ti que no vas a volver, a pesar de que ella lo deseaba como nada en su vida aunque era consciente de que las segundas partes nunca han sido buenas. Nada cambia. Si la primera vez fracasó el amor, la segunda no reverdecerá. La empatía que no triunfó al principio, no lo hace al final.

Dicen que esta canción tenía destinatario: quien fuera la expareja y manager de la artista, Fachtna O’Kelly, posteriormente colaborador de Enya. La voz absolutamente mágica de la irlandesa derrama tristeza en todas las estrofas, dotándolas de un realismo tan especial como desgarrador. Su versión es sobrecogedora gracias a estar dotada de un aire más nostálgico proporcionado por el arreglo musical.

El vídeo promocional no baja ningún escalón de calidad con respecto a ‘Notihing compares to you ‘. Consistía básicamente en un plano de acercamiento a su rostro, por el cual al final rodaban un par de lágrimas mientras cantaba ‘Todas las flores que plantaste, mamá, murieron cuando te fuiste’, en referencia a la compleja relación que había tenido con su madre, muerta en un accidente de tráfico.

Han pasado siete horas y quince días
desde que te llevaste tu amor
Salgo todas las noches y duermo todo el día
desde que te llevaste tu amor

Desde que te fuiste puedo hacer lo que quiera
Puedo ver a quien yo elija.
Puedo cenar en un restaurante caro

Pero nada,
dije nada, puede quitar esta tristeza
Porque nada se compara,
nada se compara a ti

Ha sido tan solitario sin ti aquí,
como un pájaro sin una canción
Nada puede detener estas lágrimas solitarias que caen

Dime, cariño, ¿en qué me equivoqué?
Podría abrazar a todos los chicos que veo,
pero sólo me recordarían a ti.
Fui al médico, ¿adivina que me dijo?,
¿adivina que me dijo?

Dijo, querida, deberías divertirte,
no importa lo que hagas,
pero él es un tonto
Porque nada se compara,
nada se compara a ti

Todas las flores que plantaste, amor,
en el jardín,
todas murieron cuando te fuiste
Sé que vivir contigo, cariño, a veces fue difícil
Pero estoy dispuesta a intentarlo una vez más

Porque nada se compara,
nada se compara a ti

VERSIONES

La interpretación de PRINCE poco tiene que ver con la de O’Connor.

Tampoco la que grabó THE FAMILY en su disco.

http://youtu.be/NgKv8KNSgbE

El norteamericano de Seattle CHRIS CORNELL dio su visión particular.

También se vieron tentados por ‘Nothing compares to you’ Mr. Bungle, el grupo alemán Chyp-Notic, Dune, Me First and the Gimme Gimmes, Northern Kings, Shiny Toy Guns, Stereophonics, Fire Through the Window, The Coconutz, Dan Kelly, All Angels, Goapele, el dúo noruego Brødrene Löwenstierne, Dinho Ouro Preto o Bo Bruce.

SINEAD MARIE BERNADETTE O’CONNOR es dublinesa. Hija de un cantante tradicional en gaélico, durante su juventud formó parte de varias experiencias musicales en grupos como Ton Ton Macoute para dar el salto a cantar en solitario de la mano del experimentado productor Fachtna O’Ceallaigh, sin conseguir demasiado éxito en sus primeros pasos a pesar de que las críticas fueron buenas.

La fama llegaría con la canción a la que hoy nos referimos y le llevó a interpretar en 1990 con otros músicos ‘The Wall’, de Pink Floyd. Su siguiente disco, versiones de canciones que escuchó durante su infancia, fracasó. Pero volvió a lo más alto de su popularidad un año más tarde al cantar ’You made me the thief of your heart’ a dúo con Bono para la banda sonora de la película ‘En el nombre del padre’.

Luego llegaron discos más enraizados en la música popular irlandesa que obtuvieron mayor reconocimiento que ventas. Todo ello le llevó a un período de inactividad, durante el que descubrió que era víctima de fibromialgia.

Aunque siga en activo, la irlandesa ha sido incapaz de acercarse al éxito y sus actuales contactos con la popularidad se deben más a sus controversias, extravagancias y declaraciones que a lo que consigue en el escenario. Este año se ha visto obligada a suspender una gira por un trastorno bipolar. Con sólo 45 años se ha casado y divorciado en cuatro ocasiones. Su último enlace duró dieciséis días.