Este grupo y esta canción pueden considerarse los primeros productos de laboratorio musical que surgieron en España. Ocurrió en los primeros meses de 1970, cuando la multinacional discográfica CBS se instaló definitivamente en nuestro país. El productor Rafael Pérez-Botija, responsable artístico del sello, fue el encargado de crear las primeras obras ‘made in Spain’ para completar un catálogo hasta ahora compuesto por trabajos llegados desde el extranjero.
Pérez-Botija eligió a Cecilia como solista estrella y creó La Compañía para hacerse con el mercado de las bandas vocales mediante adaptaciones de temas clásicos y zarzuelas a ritmo de pop, un terreno que ya había labrado con éxito Miguel Ríos con el ‘Himno de la alegría’, basado en la ‘Novena sinfonía’ de Beethoven.
La Companía debutó en el microsurco en 1971 con ‘El soldadito’, que rápidamente ascendió a los primeros puestos de las listas de éxitos de aquel año gracias a los arreglos muy logrados que protagonizó Juan Carlos Calderón a partir del fragmento de la habanera ‘Marchaba a ser soldado (El saboyano)’. Originalmente, esta pieza era interpretada por un mendigo con organillo en la castiza zarzuela ‘Luisa Fernanda’, escrita por Federico Moreno Torroba y con libreto de él y Guillermo Fernández Shaw en 1932.
Su base interpretativa se sustentaba sobre dos coros –femenino y masculino– que se contestaban para unirse en un final mixto, con una batería siempre presente en primer plano.
Compartió el hit parade de aquel año con el ‘Quiero abrazarte tanto’, de Víctor Manuel; ‘El chico de la armónica’, de Micky; ‘We shall dance’, de Demis Roussos; y ‘Un beso y una flor’, de Nino Bravo. Sin duda, rivales de mucha entidad. Aún así, ocupó durante cuatro semanas el primer puesto de ventas, tras confirmarse como canción del verano.
En esta obra del género chico el soldadito marcha a batallar sin hacer mucho caso a Luisa Fernanda y ella, cansada de esperar, se promete con un hacendado extremeño que posee una finca cerca de Piedras Albas. De todas formas, al final, el amor verdadero vence. ¡Cómo no! Todo ello con el trasfondo del derrocamiento de Isabel II y la proclamación de la I República.
La repercusión de ‘El soldadito’ se amparó en el conocimiento generalizado por parte de los españoles de las zarzuelas, machacónamente programadas por la única televisión que existía por entonces en este país. Todo a pesar de que la grabación que se utilizó para promocionar el tema nada tenía que ver con los futuros videoclips.
La coreografía, cuanto menos, es peculiar, pero no podemos mirarla con ojos contemporáneos. Conviene retrotraer nuestra mente casi cinco décadas y, sobre todo, mostrar condescendencia con el look de minifaldas de cuadritos. Primitiva, pero impagable grabación.
Marchábase el soldado
cuando al mozo le salió a despedir
la moza que le amaba
y que quería con él partir
Anda con Dios soldadito
que a las banderas te vas
yo te prometo y te anuncio
que vas ser general
El soldadito le prometía
paloma mía yo he de volver
y en nuestra boda serán mis arras
los entorchados de brigadier
Ella se queda sobre un ribazo
con el pañuelo diciendo adiós
la prometida del soldadito
hasta que a penas se ven los dos
Marchábase el soldado
cuando al mozo le salió a despedir
la moza que le amaba
y que quería con él partir
Anda con Dios soldadito
que a las banderas te vas
yo te prometo y te anuncio
que vas ser general
El soldadito le prometía
paloma mía yo he de volver
y en nuestra boda serán mis arras
los entorchados de brigadier
Ella se queda sobre un ribazo
con el pañuelo diciendo adiós
la prometida del soldadito
hasta que a penas se ven los dos
Marchábase el soldado
cuando al mozo le salió a despedir
la moza que le amaba
y que quería con él partir
Anda con Dios soldadito
que a las banderas te vas
yo te prometo y te anuncio
que vas ser general
El soldadito le prometía
paloma mía yo he de volver
y en nuestra boda serán mis arras
los entorchados de brigadier
quien le dijera que el soldadito
sueña en los brazos de otra mujer
y que en la boda fueron las arras
los entorchados de brigadier
VERSIONES
La zarzuela original es imprescindible para entender la revisión que realizó La Compañía.
LA COMPAÑÍA nació como grupo local que recreaba temas de viejas zarzuelas a ritmo pop. Su alma máter Rafael Pérez-Botija embarcó en el proyecto a Álvaro Nieto, de Los Pasos, a Manuel Escobar, de Los Sonor; y a Julio Seijas, de Aguaviva; junto a otros vocalistas sin experiencia anterior en el mundo de la música, hasta reunir una formación con ocho miembros.
Tras éxito de ‘El soldadito’, su obra de debut, llegó el larga duración ‘Reestreno’, un recorrido por romanzas y las canciones más importantes de creaciones de zarzuela como ‘Luisa Fernanda’, ‘La tabernera del puerto’, ‘Doña Francisquita’ o ‘La canción del olvido’. Este trabajo acabó en los tribunales por la adaptación de ‘Romanza de Morala’, de ‘La tabernera del puerto’, ya que el maestro Pablo Sorozábal denegó su permiso para la adaptación titulada ‘En un país de fábula’. La justicia falló a favor del autor, al considerar que su obra había sido mutilada y deformada.
Además, en 1972 la banda fue visitada por la tragedia, ya que una de sus componentes, Ana María Fernández, falleció víctima de un accidente de tráfico. En su honor publicaron ‘Tema para Ana’.
Un año más tarde llegó su segundo álbum, titulado sencillamente ‘La Compañía’ y que incluía el éxito ‘Gitano’, que volvió a aupar al grupo a los primeros puestos de las listas. El tema compitió incluso con el ‘Eres tú’ de Mocedades por representar a España en Eurovisión.
Entre 1974 y 1976, ya convertidos en sexteto, publicó sus últimos singles, sin que ninguno de ellos tuviera repercusión comercial, lo precipitó la desaparición del grupo.
Un par de años más tarde, Álvaro Nieto, ya director artístico de Movieplay, se puso de nuevo en contacto con Seijas para que la agrupación renaciera bajo el nombre de La Pequeña Compañía, que llegó a despertar gran interés entre los públicos español y latinoamericano con discos llenos de versiones de boleros, cha-cha-chas, villancicos, pasodobles o coplas. Versiones enganchadas, como dicen en Hispanoamérica. Otros componentes de La Compañía triunfaron en diversos campos del mundo del espectáculo.