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Anje Ribera

Música callada

Jefferson Airplane – Somebody to love (Alguien a quien amar)

‘Somebody to love’, el tema con mayor repercusión de Jefferson Airplane, constituyó la aportación de la cantante Grace Slick cuando se incorporó al grupo estadounidense. Procedía de Great Society –con quien ya grabó esta canción– y de allí se trajo esta preciosa composición escrita por su cuñado Darby Slick.

El tema pronto se convirtió en uno de los muchos himnos del movimiento hippie, de todo una corriente ideológica y contracultural, del llamado verano del amor y de la época de experimentación, descubrimiento y revolución de los sesenta y principios de los setenta.

Su salida al mercado en 1967 significó un ligero endurecimiento en la línea melódica del conjunto californiano, adoptando un sonido lisérgico con voces femeninas mas duro que le alejó de su primitiva psicodelia y, en cierto modo, supuso un regreso a las influencias del folk y el blues. De la suma resultó un eslabón imprescindible en la cadena de la música.

Gracias a su repetitivo estribillo cosechó un éxito comercial no perseguido en un principio y con el paso del tiempo ha logrado superar la esfera temporal y presentarse en la actualidad como una canción imprescindible para conocer lo que se vivió en Estados Unidos por aquella época. Su interpretación en el mítico Festival de Woodstock de 1969 supuso uno de los momentos cumbre en la historia de la psicodelia ligada al LSD, un símbolo de la contracultura.

Grace Slick explicó más tarde en una entrevista que en ‘Somebody to love’ no cantó, sino que se limitó a hablar, con un sonido que salía más de su nariz que de su boca. El tema se inicia a capella, para luego ir subiendo de ritmo hasta llegar a un momento efervescente.

Es una canción de amor con una letra sencilla y sin complicaciones que, sin embargo, nos traslada una petición desesperante, un chillido de angustia. «¿No quieres a alguien a quien amar? ¿No necesitas a alguien a quien amar? Más vale que encuentres a alguien a quien amar…». Todo ello escondiendo entre versos un guiño a la cultura de la droga.

Cuando la verdad resulta ser mentira
y toda la alegría dentro de ti muere
¿no quieres a alguien a quien amar?
¿no necesitas a alguien a quien amar?
¿No te encantaría tener a alguien a quien amar?
Más vale que encuentres a alguien a quien amar.

Cuando las flores del jardín están muertas
y tu cabeza está llena de marihuana
¿no quieres a alguien a quien amar?
¿no necesitas a alguien a quien amar?
¿No te encantaría tener a alguien a quien amar?
Más vale que encuentres a alguien a quien amar.

Tus ojos, puede que tus ojos parezcan los suyos
pero me temo que en tu cabeza estás perdido
¿no quieres a alguien a quien amar?
¿no necesitas a alguien a quien amar?
¿No te encantaría tener a alguien a quien amar?
Más vale que encuentres a alguien a quien amar

Las lágrimas corren por tu pecho
y tus amigos te tratan como si fueras una visita
¿no quieres a alguien a quien amar?
¿no necesitas a alguien a quien amar?
¿No te encantaría tener a alguien a quien amar?
Más vale que encuentres a alguien a quien amar

VERSIONES

La original de GREAT SOCIETY salió unos años antes, pero no obtuvo ninguna repercusión.

http://youtu.be/NzyDLwUgFdc

Los duros de RAMONES hicieron su revisión en 1993.

http://youtu.be/R7hui5OQu1E

Más moderna es la interpretación de ALICE GOLD.

En el cine ‘Somebody to love’ ha sido repetidamente utilizada. JIM CARREY realizó una tremenda interpretación en ‘Un loco a domicilio’.

Los HERMANOS COEN la incluyeron en la banda sonora de ‘Un hombre serio’, de 2002, y también sale al principio de ‘Cuatro hermanos’.

JEFFERSON AIRPLANE surgió en San Francisco y protagonizó los primeros pasos del movimiento psicodélico que caminó de forma paralela al power flower de los hippies. Casi sin buscarlo pronto gozó de éxito comercial y crítico, llegando incluso a protagonizar actuaciones más altamente remuneradas que las de los grandes grupos pop y rock del momento.

Dio sus primeros pasos en 1965 caminando sobre la vereda folk y blues-rock de la mano de Jorma Kaukonen (guitarra), Paul Kantner (guitarra rítmica), Marty Balin (voz), Signe Anderson (voz), Jerry Peloquin (batería, después sustituido por Skip Spence) y Bob Harvey (bajo, después reemplazdo por Jack Casady). También pronto se marcharon Anderson y Spence, entrando en su lugar la cantante Grace Slick y el batería Spencer Dryden.

Con su llegada grabaron el álbum ‘Surrealistic pillow’, que incluía la mencionada ‘Somebody to love’ y ‘White rabbit’. Estas dos canciones les dieron la posibilidad de participar en el festival de Woodstock junto con artistas como Janis Joplin o Jimi Hendrix. 

Fue su momento álgido. Después llegaron numerosos cambios de formación y nombre –Jefferson Starship, Jefferson Starship The Next Generation o Starship–, pero nunca más volvieron a repetir aquel éxito.

Canciones para escuchar a oscuras - Por Anje Ribera

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