‘Goizeko euri artean’ nos habla de la soledad, como la que sintió Txomin Artola mientras realizaba el servicio militar en el Sáhara, por entonces todavía colonia española. En las noches iluminadas del desierto surgió esta canción de 1978, expresión comparable al mejor folk mundial.
La morriña gallega la sintió en esa ocasión un vasco de Hondarribia, obligado a alejarse de casa por un mandato que no entendía y que poco más tarde fue eliminado: la famosa mili. Pero Artola nos escribió ya entonces, en los setenta, de un fenómeno que todavía no se había manifestado en nuestra tierra. La llegada de inmigrantes a Euskadi era algo impensable, a pesar de que los vascos hemos tenido gran vocación emigrante a lo largo de nuestra historia.
Con un sonido principalmente acústico basado en la guitarra, la voz limpia de Txomin Artola, a la altura de las mejores cantantes del folk-rock anglosajón, nos traslada la inspiración abrumadora que otorga la distancia de los tuyos y de tu entorno. Todavía exhibió en esta creación las influencias de los norteamericanos Bob Dylan y Simon & Garfunkel, sus grandes ídolos junto con el británico John Renbourn, Las materializó con una voz dulce, tranquila, con modulación lenta, sin estridencias.
http://youtu.be/3Ud_E2PL2-0
Bajo la lluvia de la mañana, sin paraguas,
con las manos en los bolsillos
y una pena en el corazón, estoy lejos
de casa, bajo la lluvia de la mañana,
sólo con mi guitarra
Tengo que encontrar un trabajo para comer
algo hoy, pero es difícil porque soy extranjero,
he cantado en la calle canciones de mi país
y la gente me ha dejado algo en la lluvia de la mañana
«No andes así vagando, mejor quédate conmigo»
dice una chica. A veces me pregunto que hago aquí,
y para qué le doy tantas vueltas a todo
Pero tengo que seguir adelante hasta encontrar
mi camino, tengo que estar solo hasta conseguirlo,
y un día veré feliz cómo sale el sol de entre
la lluvia de la mañana
VERSIONES
El grupo joven de Astigarraga EIRA ofreció ‘Goizeko euri artean’ durante un concierto navideño interpretado en Escuela de Música Norberto Almandoz de su pueblo.
El grupo de folk progresivo HAIZEA nació en 1975 basado en las voces de Txomin Artola y la genial Amaia Zubiria. El éxito fue inmediato y arrollador dentro del pequeño universo de la música en euskera. Fue el primer ‘supergrupo’ vasco al completar una alineación de diseño con grandes músicos como Xavier Lasa (guitarra y flauta), Gabriel F. Berrena (bajo y contrabajo) y Carlos Busto (batería, percusión y xilófono).
Con un bagaje de sólo dos discos dejaron para el recuerdo canciones inolvidables como la mencionada ‘Goizeko euri artean’, ‘Brodatzen ari nintzen’, ‘Loa loa’, ‘Arnaki’… Todas muestras de una gran creatividad cargada de un ambiente mágico y poético, con música tranquila, dulce y dotada de efectos especiales. La magnífica combinación de guitarras eléctricas y acústicas y voces masculinas y femeninas produjo dos discos excelentes en 1978 y 1979. Reeditados por una compañía catalana, son aún muy apreciados. Sus vinilos constituyen piezas muy apreciadas por los coleccionistas.
Fue un grupo fuera de tiempo, ya que nació, se desarrolló y murió en una época en la que la música vasca sólo se utilizaba para difundir mensajes políticos o con fines reivindicativos. Ellos, embargo, obviaron esas corrientes y se dedicaron al folk, con un estilo muy parecido al del conjunto inglés Pentangle.
Haizea falleció cuando Txomin Artola emprendió el camino en solitario. Inicialmente fue sustituido por Xabier Iriondo, pero al poco tiempo el quinteto se disolvió.