‘Unchained melody’ es otra de esas canciones que se ha visto obligada a reivindicarte a través del cine. En este caso también tarde. Muchos años después de su creación, la versión de The Righteous Brothers fue incluida en la banda sonora de ‘Ghost’ y se convirtió en un hit a pesar de que ya era un clásico desde hace décadas.
La icónica escena entre la alfarera Demi Moore y el fantasma Patrick Swayze se ha convertido en una imagen difícil de borrar de la retina de los millones de espectadores que llenaron las salas de todo el mundo para ver la película en 1990. Estaba adornada con esta ‘melodía encadenada’ –es como se conoció en el mundo hispano cuando realmente su traducción literal expresa lo contrario– grabada en 1965. La repercusión fue tal que los ‘hermanos’ se vieron obligados a registrarla de nuevo para lograr una producción que estuvo nominada para los Grammy.
La letra de Hy Zaret y la música de Alex North se convirtió en vinilo en 1955 precisamente para otra película, una producción con tema carcelario que tuvo muchas repercusión en la época –fue nominada para el Óscar de aquel año y hasta se grabaron cuatro versiones diferentes que entraron en las listas británicas–, para luego no superar el paso del tiempo y pasar al olvido.
A mí me parece buena, pero eso es cuestión de opiniones. Lo que es incuestionable es que gusta y para probarlo basta con decir que hay más de medio millar de versiones distintas. No hay estadísticas fidedignas, pero puede ser el tema con más graabciones e interpretaciones del siglo XX. Elvis Presley la utilizó en el ocaso de su carrera, allá por 1977, en lo que constituyó su última aparición televisiva, y también U2 es habitual que lo incorpore a su repertorio en directo. Tampoco hay que olvidar las revisiones protagonizadas por Iva Zanicchi, Roy Orbison o Il Divo. Sin embargo, entre las desconocidas está la de Gene Vincent, muy recomendable.
Oh, mi amor, mi querida,
he deseado tanto tus caricias
durante un largo, solitario tiempo.
Y el tiempo pasa tan lento,
y el tiempo puede hacer tantas cosas.
¿Eres mía aún?
Necesito tu amor.
Necesito tu amor.
Que dios me envíe tu amor.
Los ríos solitarios fluyen hacia el mar, hacia el mar,
hacia los brazos abiertos del mar.
Los ríos solitarios susurran: “espérame, espérame”.
Voy camino a casa, espérame.
Oh, mi amor, mi querida,
he deseado tanto tus caricias
durante un largo, solitario tiempo.
Y el tiempo pasa tan despacio,
y el tiempo puede hacer tantas cosas.
¿Eres mía aún?
Necesito tu amor.
Necesito tu amor.
Que dios me envíe tu amor
The Righteous Brothers fue un dúo californiano compuesto por Bill Medley y Bobby Hatfield que tuvo su época de esplendor entre 1963 y 1975, aunque su carrera se prolongó hasta 2003, cuando fue interrumpida con la muerte del segundo. Eligieron su nombre de un acontecimiento que vivieron mientras actuaban en un bar de Los Ángeles y un marinero del público les gritó «That was righteous, brothers» (Eso estuvo excelente, hermanos).
La excepcional combinación de ambas voces y las producciones de Phil Spector les acarrearon muchos discos de éxito, aunque popularmente pocos recuerden más temas que ‘Unchained melody’. La asociación de talentos se prolongó durante cuatro décadas, aunque Medley también protagonizó pequeñas aventuras en solitario, especialmente con dúos junto a distintas cantantes, casi siempre destinados a música de cine. Fue muy popular la interpretación de ‘(I’ve had) The time of my life’ que compartió con Jennifer Warnes para ‘Dirty dancing’. Se llevó un Grammy, un Óscar y un Globo de Oro.