Citróen o Ford. Ford o Citröen. Como el gato y el ratón. No hay más. El Mundial de rallies arranca hoy en Irlanda lastrado por la crisis y las decisiones de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) que han reducido la competición a su mínima expresión. Las ausencias de los equipos oficiales de Subaru y Suzuki por problemas económicos, y el sistema de rotación bianual ideado para confeccionar el calendario han dejado a la especialidad con tan sólo doce pruebas para esta temporada.
Por si esto fuera poco, se han quedado fuera citas míticas como la de Montecarlo y entran Irlanda, Australia, Polonia, Chipre, Portugal y Noruega. A la espera de la llegada de los Súper 2000 prevista para dentro de dos años, con los que se reducirán los costes económicos para los equipos, esta temporada será la última en la que se vea en solitario a los WRC.
Uno de los aspectos que puede dar mayor emoción a esta campaña será que la mayoría de citas se disputarán en tierra. Tan sólo habrá dos sobre asfalto donde los Citröen han demostrado que no tienen rivales. La marca gala con el cinco veces campeón del mundo Sebastian Loeb y su delfín Dani Sordo, saldrán a defender el entorchado tanto de pilotos como de constructores. El galo es uno de los mejores pilotos de la especialidad en la historia de este deporte, sabe adaptarse a todos los terrenos y la experiencia que acumula le convierten en el rival a batir. El cántabro sigue con su progresión y este año ya ha declarado que su objetivo será la victoria en alguna de la pruebas.
Al otro lado de la balanza estarán los Ford de Mikko Hirvonen y Jari-Matti Latvala, dos jóvenes que el pasado año ya mostraron de lo que son capaces y que quieren dar la sorpresa y desbancar a su todopoderoso rival. Ambos son nórdicos. Rápidos y con sangre fría. El primero destaca sobre todo por su regularidad, el pasado año logró puntuar en todas las pruebas, el segundo siempre busca el límite, aunque todavía le hace falta un poco de temple al volante.
Por detrás de ellos estarán pilotos de la talla de Chris Atkinson, que tras la desaparación de Subaru estará en la J-WRC con un Citröen junto a el ruso Novikov, el galo Sebastien Ogier, y Conrad Rautenbach. Por esta categoría también pugnarán los Suzuki de Burkart, Kosciuszko y Bertolotti, entre otros. En la de producción P-WRC estará el segundo español. El navarro Egoi Eder Valdés que, procedente de la CM y tras correr el año pasado el Rally de Cataluña, disputará por primera vez un Mundial.
Irlanda abre hoy el calendario, con carreteras estrechas, temperaturas bajo cero, peligro de hielo y hasta de nieve. 19 tramos y un total de 366,75 kilómetros. Comienza el espectáculo en el que Citröen y Ford jugarán al gato y al ratón. Ahora sólo hace falta ver qué papel hace cada uno.