Una ciudad implica toda su oferta de servicios, las características de su población, su economía, arquitectura, clima, cultura, educación, tecnología, ciencia, medio ambiente y un largo etcétera. La creciente competencia de las ciudades ha propiciado la aparición de este nuevo enfoque llamado marketing urbano para conseguir atraer más visitantes, negocios, talento e inversión. De ahí que todas las ciudades se esfuerzan por transmitir una imagen personalizada no solo para los visitantes sino también para sus propios ciudadanos.
En realidad, no son las ciudades las que compiten, sino las empresas por establecerse en uno u otro lugar. El marketing urbano lo que permite es una definición más clara de la imagen de una ciudad y elaborar una estrategia de marketing más precisa a nivel interno y externo.
Este tipo de marketing está teniendo cada vez más relevancia en las ciudades, ya que permite elaborar una serie de estrategias para mejorar la imagen que ofrece a sus habitantes y visitantes.
Muchos son los factores que influyen en la imagen que se tiene de una ciudad, desde su seguridad, el número de nacionalidades diferentes, la calidad de vida, la edad de su población, etc. Vamos a ver siete factores que influyen decisivamente a la hora de implementar una estrategia de marketing urbano:
Todos estos factores sin duda ayudarán a la elaboración de una estrategia de marketing urbano mucho más precisa y orientada a crear ciudades cada vez más sostenibles y dinámicas para sus habitantes.
El principal objetivo es generar una imagen positiva del lugar que propicie mayor crecimiento económico, cultural y social. Y esto se consigue mediante la planificación, gestión y control de todas las relaciones de intercambio de la ciudad con su público potencial y los mercados.