EL MARKETING VISTO DESDE UN COCHE
Actualmente las empresas encargadas del marketing para coches, crean y nos muestran estrategias de marketing en las cuales su producto, destaca por diferentes aspectos como pueden ser tecnología, diseño, precio. En estas campañas de marketing captan nuestra atención con paisajes increíbles, con la comodidad que puede suponer tener dicho vehículo, con cómo podemos cumplir nuestro sueño de conseguir ese deseado modelo con el que soñamos, o al menos ahora lo hacemos después de que hemos visto ese flamante anuncio.
Campañas de marketing motorizado
Estas campañas nos hablan de que nos lo merecemos, nos hablan de recorrer el mundo, o de verlo desde la cima más alta que se pueda alcanzar. Estas campañas de marketing nos ayudan a intentar alcanzar esas metas que nos marcan.
¿Qué pretenden conseguir estas empresas realmente?
Estas empresas lo que buscan es en primer lugar es captar la atención de ese target objetivo al cual van enfocadas esas campañas, se intenta acotar lo máximo posible el mismo, para que la campaña tenga el menor coste posible y a su vez la mayor repercusión e impacto sobre estos futuros clientes.
Hoy en día el inbound marketing está gobernando este mundo, esa cooperación entre diferentes “campos” del marketing hace que mejoren los resultados. El marketing 360º con el que convencer, captar al cliente o ese ya conocido marketing 2.0 consigue que su público objetivo opina, comenta, interactúa con la empresa y una forma de hacerlo son las redes sociales.
Redes sociales
El marketing y nuestras redes sociales, también pueden ayudar a conseguir esa sensación de libertad, pues con ellas, son capaces de gritar al mundo entero, o al menos al público que quiera escuchar, el mensaje que queramos difundir en ese momento.
No existe mayor sensación de libertad que la de conducir tu coche aunque sea un coche de segunda mano, siendo acariciado por el viento después de un largo día de trabajo. Sin duda esa sensación tan placentera de gobernar el vehículo y fundirse en una comunión y en una simbiosis en la cual ya no se sabe con certeza quién está conduciendo a quien, es uno de los mayores placeres que puede sentir una persona en este mundo.