Ya hemos resuelto en la entrada anterior, dentro de lo que sabemos, lo del sexo de los hijos; ahora vamos a por otra de las incógnitas: su inteligencia. Otra vez con estudios epidemiológicos y propuesta final de hipótesis. En primer lugar, William Lassek y Steven Gaulin, de la Universidad de Pittsburgh y de la Universidad de California en Santa Barbara respectivamente, que aseguran que las mujeres con el cociente más bajo cintura/cadera tendrán hijos más inteligentes. Es decir, las mujeres con las caderas más anchas que la cintura, o sea, con las tan odiadas “cartucheras”, tendrán los hijos más listos. Para ello estudiaron las características físicas y de inteligencia de 16325 mujeres y de sus 4019 niños y adolescentes. Y descubrieron lo ya mencionado: la acumulación de grasa en la zona gluteofemoral, es decir, el culo y los muslos, da más probabilidades de tener un hijo inteligente. Según los autores, esa reserva de grasa es ideal para el desarrollo del sistema nervioso del feto y, por lo tanto, de sus futuras habilidades mentales.
Pero si una no tiene las cartucheras siempre puede intentar algo una vez que el niño ha nacido; además de educarle, quiero decir. Para ello, Michael Kramer y sus dieciocho colaboradores de la Universidad McGill, de Québec, nos dan una pista: dar el pecho a los hijos, de manera exclusiva y prolongada, mejora el desarrollo de la inteligencia del niño. Para llegar a esta conclusión, los autores hicieron el seguimiento de 17046 niños, alimentados por sus madres, durante dos periodos: en 1996 y 1997 y, posteriormente, del 2002 al 2005. Según los autores, las madres que amamantan a sus hijos les dedican más tiempo, juegan con ellos, interaccionan con sus hijos en una fase muy importante del desarrollo de su sistema nervioso y, de esta manera contribuyen a su mayor inteligencia.
En resumen, hijos más inteligentes para las mujeres con caderas anchas y pechos dispuestos para alimentar a sus retoños. Quizá una imagen no muy moderna de la mujer, según los estereotipos de nuestra sociedad, pero así son los hallazgos de la ciencia, a veces no nos acaban de gustar del todo.
*Kramer, M.S., F. Aboud, El Mironova, I. Vanilovich, R.W. Platt, L. Matush, S. Igumnov, E. Fombonne, N. Bodganovich, T. Ducruet, J.-P. Collet, B. Chalmers, E. Hodnett, S. Davidovsky, O. Skugarevsky, O. Trofimovich, L. Kozlova & S. Shapiro. 2008. Breastfeeding and child cognitive development. Archives of General Psychiatry 65: 578-584.
*Lassek, W.D. & S.J.C. Gaulin. 2008. Waist-hip ratio and cognitive ability: is gluteofemoral fat a privileged store of neurodevelopmental resources? Evolution and Human Behavior 29: 26-34.