Empatía es la identificación mental y afectiva de una persona con el estado de ánimo de otra. Claus Lamm y su grupo, de
En resumen, si hay dolor o si se empatiza dolor, se activan las mismas áreas del cerebro. Y, además, se activa el área relacionada con los sentimientos y las emociones.
Sin embargo, Nicolas Danziger y sus colegas, del Hospital Pitié-Salpêtrière de París, plantean una hipótesis por demás curiosa: se preguntan si una persona que nunca ha experimentado el dolor es capaz de sentir empatía por quien siente dolor. Según el difunto Stieg Larsson, la respuesta es taxativamente que no. Aclaremos este embrollo: Ronald Niedermann es el personaje de la serie Millenium, escrita por Stieg Larsson, que no siente dolor, que nunca lo ha sentido pues padece de analgesia crónica (CIP, del inglés Congenital Insensitivity to Pain, Insensibilidad Congénita al Dolor). Es el brutal “asesino rubio” que quiere acabar con Lisbeth Salander (y no sigo para no destripar el argumento) y es totalmente insensible al dolor que provoca. No sabe lo que es y significa la empatía. Veamos que tiene que decir la investigación de Danziger sobre la creación literaria de Larsson.
Toman, por resonancia magnética, imágenes del cerebro de 13 pacientes con analgesia y 13 pacientes sin el síndrome. Se les ha pedido que imaginen los sentimientos de una persona que se les muestra en fotografía o video y que siente dolor o está a punto de hacerse daño (cortarse un dedo con unas tijeras de podar, con gestos de dolor en la cama de un hospital).
Los voluntarios sin síndrome, como en la investigación de Lamm, activan la zona del dolor propio y ajeno (corteza cingulada media; corteza de la ínsula anterior) y la zona de los sentimientos y emociones. Sin embargo, los pacientes con analgesia activan algo la zona del dolor, mucho menos que los otros voluntarios, y activan la zona de los sentimientos. Es decir, la empatía no es sentir el dolor de otro, la empatía es sentir lo que siente el otro y, seguramente, da igual que es lo que provoca el sentimiento ajeno, sea el dolor o cualquier otra causa. Rudolf Niedermann no sólo no era analgésico, además era incapaz de sentir el sentimiento de otro, carecía totalmente de empatía.
*Danziger, N.,
*Lamm, C., J. Decety & T. Singer. 2011. Meta-analytic evidence for common and distinct neural networks associated with directly experimental pain and empathy for pain. NeuroImage 54: 2492-2502.