Opino que sólo en
Han trabajado con 20 voluntarios, de ellos 16 hombres, de
La fondue está marcada con carbono 13 que, durante la digestión, se exhala con el aliento y permite medir el tiempo que dura. Y, a la vez, también se mide el alcohol en el aliento. Las exhalaciones se hacen cada 10-15 minutos durante las cuatro horas que siguen a la fondue. Por medio de encuestas, se cuantifica, después de la comida, el apetito, saciedad, hambre, ganas de comer, así como los síntomas de indigestión como las náuseas, los eructos, la acidez o la sensación de empacho.
Los resultados son claros: después de la fondue, el estómago se vacía más lentamente si se ha tomado alcohol. Incluso en el caso de beber té negro en la comida y schnapps hora y media después, en el momento de tomar el licor el vaciamiento del estómago se hace más lento. El apetito es parecido en todos los casos, excepto en el caso de vino más schnapps en que disminuye. No hay relación entre el consumo de alcohol y los síntomas de mala digestión.
En resumen, tomar alcohol en las comidas disminuye el apetito si la dosis es alta y hace la digestión más lenta, pero no se asocia con la indigestión o el empacho.
*Heinrich, H. y 8 colaboradores. 2010. Effect on gastric function and symptoms of drinking wine, black tea, or schnapps with a Swiss cheese fondue: randomised controlled crossover trial. British Medical Journal 341: c6731.