Esto del escarabajo de la patata como plaga, capaz de terminar con una cosecha y llevar el hambre y la pobreza a una comarca, es cosa nuestra, es algo que el hombre creó, por supuesto que sin intención y sin tener conciencia de ello. Es una consecuencia de la tan mencionada globalización, aunque el escarabajo fue globalizado antes de que fuese utilizado masivamente este concepto. Nuestra especie tomó la patata de su centro de origen, Perú y Bolivia en Sudamérica, y la llevó por todo el mundo y, así, la planta encontró al escarabajo cuando llegó a Norteamérica, a las Grandes Llanuras, entre Iowa y Colorado y México al sur. El escarabajo, de nombre científico Leptinotarsa decemlineata, tenía un área de distribución no muy extensa y tampoco era muy abundante. Y el escarabajo atacó a la patata, se alimentó de ella y se convirtió en una plaga. Viajó con su alimento, de país en país, de continente en continente.
El animal es nativo, como he dicho, de México y de los estados centrales de Estados Unidos. Las poblaciones originales se alimentan sobre todo de una planta llamada “buffalobur”, con nombre científico Solanum rostratum, y de otras plantas de la familia de las Solanáceas, la misma familia de la patata, Solanum tuberosum, El escarabajo fue descubierto en 1811 y descrito y bautizado con su nombre científico en 1824 por Thomas Say con ejemplares recogidos en la frontera en Iowa y Nebraska.
El primer contacto entre la patata y el escarabajo tuvo lugar, seguramente, antes de 1820 pero el primer estallido como plaga fue en 1859, en Nebraska, unos 150 kilómetros al oeste de la ciudad de Omaha. En 1862, un granjero de Kansas pone por escrito, por vez primera, la angustia de ver destruida, en poco tiempo y con gran ferocidad, toda su cosecha de patatas. Y, así, mientras el contacto entre el escarabajo y la patata fue anterior y, quizá, pasó desapercibido, la aparición del tercer personaje de esta tragedia, el agricultor, antes o después debía ser hecho público y conocido por todo el mundo.
A partir de entonces, la expansión del escarabajo hacia el este, en Estados Unidos, fue muy rápida, pues había mucha patata sembrada, y en poco más de 15 años, entre 1874 y 1880, llegó a la costa atlántica. Hacia el oeste su dispersión fue más lenta pues había menos plantaciones de patata y en 1910 llegó a la costa del Pacífico. En 1874 apareció una considerable población en Colorado y, a pesar de que comía su alimento original, Solanum rostratum, pues había pocas patatas, allí recibió el nombre por el que se le conoce en los países anglosajones, escarabajo de la patata de Colorado.
La primera población en Europa apareció en Alemania en 1877 y fue rápidamente exterminada. La cuarentena para barcos y cargamentos de patatas, la prohibición de importarlas de Norteamérica y otras medidas protectoras evitaron la llegada del escarabajo a Europa, a pesar de algunas visitas puntuales, durante 45 años, hasta 1922, cuando se estableció en Francia, alrededor de varias bases militares norteamericanas en la zona de Burdeos, y de allí fue hacia Bélgica y Holanda por el norte y hacia España por el sur. A principios de los años 30 llegó a la frontera española y en 1935 ya se le encuentra en nuestros sembrados de patata.
Para finales del siglo XX y pesar de toas las precauciones, la plaga estaba en Europa, Asia Menor, Irán, Asia Central y el oeste de China. Unos 16 millones de kilómetros cuadrados en Norteamérica, Europa y Asia, y continua expandiéndose. Como área potencial de expansión están todas las zonas donde se cultive patata, con Asia Oriental, la India, Sudamérica (origen la planta pero no de la plaga), parte de África, Australia y Nueva Zelanda.
En la actualidad, el escarabajo es el más potente defoliante de la patata. Una sola larva consume unos 40 centímetros cuadrados de hojas en toda la fase del ciclo vital en que aparece, y los adultos cerca de 10 centímetros de hoja por día. Es más, si la plaga termina con las hojas, los escarabajos no tienen problema en seguir con el tallo y los tubérculos. Y, además, hay que tener en cuenta que cada hembra puede poner entre 300 y 800 huevos. Si no se controlan, los escarabajos pueden destruir completamente la cosecha; solo hay que repasar la historia de este cultivo para constatar que no sería la primera vez. Por si fuera poco, el escarabajo fue uno de los primeros insectos en desarrollar resistencia a los pesticidas, comenzando con el DDT en 1952 en el que fue el primer caso documentado de resistencia. Es un animal muy acostumbrado a resistir y a desintoxicarse de compuestos peligrosos pues muchas plantas de la familia de las Solanáceas, su alimento habitual, producen alcaloides tóxicos para defenderse de los depredadores. Incluso nuestra admirada patata produce un alcaloide tóxico en sus partes verdes. Por todo ello, los escarabajos han desarrollado un buen sistema desintoxicante que también les ha servido para defenderse de los pesticidas.
Ya ven, fuimos nosotros los que unimos patata y plaga. Sin querer, por supuesto, pero la globalización trae estas cosas. Ahora que sabemos que podemos crear estas situaciones, quizá deberíamos tener más cuidado con lo que hacemos.
*Alyokhin, A. 2009. Colorado potato beetle management on potatoes: Current challenges and future prospects. Fruit, Vegetable and Cereal Science and Biotechnology 3, Special Issue 1: 10-19.
*Castellan, G. 1943. Etude géographique sur la doriphore en France et principalement dans la région lyonnaise. Les Études rhodanniennes 18: 1-59.