Una caña | La biología estupenda - Blog elcorreo.com >

Blogs

Eduardo Angulo Pinedo

La biología estupenda

Una caña

De todos es conocido, y por algunos tenido en cuenta, lo malo, lo terrible, lo peligroso que es el consumo inmoderado de bebidas alcohólicas. Ya he hablado de ello, aunque otros lo hacen mucho más y hay quienes hasta hacen algo práctico para que en este consumo no se pierda el control. Y, por supuesto, hay otros que lo estudian para promoverlo; en general, son los que fabrican bebidas alcohólicas. Cuando esto escribo hace calor y, si soy sincero, lo que me apetece es una caña. La bebo y ya estoy en condiciones de comentar el trabajo de Angela Attwood y su grupo de la Universidad de Bristol, en Inglaterra: se bebe más rápido y, por tanto, más cerveza en menos tiempo si la caña nos la ponen en un vaso curvo y en uno recto. Por lo menos en Inglaterra donde, fíjense, ya saben que si suben el precio de la cerveza un 10% cae el consumo un 4.8%. En fin, veamos el trabajo de Angela Attwood.

Para empezar, la autora nos cuenta que, por lo menos en Inglaterra (y yo creo que también aquí), un numeroso grupo de fabricantes de cerveza regalan a los bares (y a la gente en general si se tercia) vasos con su nombre grabado y formas curvas: Stella Artois, Heineken, Guinness, Pilsner, Amstel, Carlsberg,… Y la autora, quizá desconfiada, se pregunta si estos vasos influyen en el consumo.

Trabaja con 159 voluntarios, la mitad mujeres, todos bebedores sociales capaces de tomar entre 5 y 25 pintas de cerveza los hombres y entre 2 y 17 las mujeres. Tienen entre 18 y 40 años y una edad media de 23 años. Se les divide en ocho grupos que van a tomar cerveza lager o un refresco con burbujas, en vaso recto o en vaso curvo y en vaso lleno o a medias. Se les pide que rellenen un documento, que creen que es lo importante del experimento en el que intervienen, y mientras lo hacen se les da el vaso con la bebida correspondiente al grupo en que les ha tocado. Todo el proceso dura 20 minutos y la `prueba se hace entre las 12.00 y las 18.00 horas.

Los voluntarios beben la cerveza lager del vaso curvo lleno en unos 7 minutos y del vaso recto en casi 12 minutos. O sea, casi en la mitad de tiempo se bebe la cerveza del vaso curvo. En cambio, para el refresco da igual la forma del vaso y se bebe, sea curvo o sea recto, en algo más de 6 minutos, casi como la cerveza en vaso curvo. Cuando el vaso está lleno a medias tampoco influye la forma y se tarda igual tanto con cerveza como con refresco.

En fin, si resumimos los resultados no es, como pensaba Angela Attwood, que el vaso curvo haga beber más rápido sino que, y quién sabe por qué, es que la cerveza, y solo la cerveza, se bebe más lento en vaso recto, casi un 60% más lento. Es así pues la cerveza en vaso curvo y el refresco en vaso curvo y recto se bebe en el mismo tiempo, es decir, en la mitad de tiempo que la cerveza en el vaso recto. Caramba.

 

*Attwood, A.S. y 3 colaboradores. 2012. Glass shape influences consumption rate for alcoholic beverages. PLoS one 7: e43007

 

Temas

Por Eduardo Angulo

Sobre el autor

Buscar


junio 2013
MTWTFSS
     12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930