Fueron millones de personas, aficionadas al fútbol o no, las que celebraron el triunfo de España en la Copa del Mundo celebrada en Sudáfrica en 2010. Y ya se sabe, el triunfo o el fracaso del grupo al que pertenecemos o con el que nos identificamos puede influir en nuestras emociones, en como nos sintamos, en definitiva, en nuestro ánimo. Necesitamos pertenecer a algo y serlo de un grupo en concreto contribuye a delimitar nuestra identidad social. En nuestra sociedad es habitual conseguir, o reforzar, esta identidad social por nuestra adhesión y apoyo a un grupo deportivo. Pero ser hincha de un grupo deportivo es una situación inestable pues las emociones que provoca dependen de cómo lo haga el equipo y de los resultados que consiga. Por ello, Marc Jones y su grupo, de la Universidad de Staffordshire en Stoke-on-Trent, Inglaterra, han estudiado la magnitud y duración de las respuestas emocionales de los hinchas de dos equipos, Inglaterra y España, que participaron en el Mundial de Sudáfrica de 2010.
Participan en el estudio 59 hinchas ingleses, con 12 mujeres y una edad media de 31.5 años, y 32 hinchas españoles, con 13 mujeres y edad media de 27.5 años. Inglaterra jugó cuatro partidos lo que da 6 puntos para tomar datos: antes del campeonato, después de cada partido, y cuatro días después de la eliminación. Como España llegó a la final jugó siete partidos y tiene 9 puntos de toma de datos: antes y después del torneo y después de cada partido.
En los muestreos se pregunta a los hinchas por la importancia que dan al campeonato, su identificación con el equipo en general y, en concreto, después de cada partido, el tiempo que dedican a la interacción social (a estar con otras personas a causa del fútbol), si han gastado más o menos dinero por el campeonato y, finalmente, por su estado emocional.
Bien, así interpretan los resultados obtenidos nuestros investigadores. La identificación de los hinchas con su equipo es, obviamente, alta, algo más en los hinchas españoles. Y, también es obvio, los hinchas quieren que su equipo lo haga bien en el campeonato, aunque ganar la Copa del Mundo es más importante para los españoles que para los ingleses.
En cuanto a las emociones de los hinchas, como los resultados de ambos equipos son diferentes, pues también lo son las emociones. Por ejemplo, al acabar el torneo, a los españoles les dura cuatro días (la encuesta post campeonato) el buen ánimo. En cambio, los ingleses, que después del último partido están de mal ánimo pues lo han perdido y les han eliminado, a los cuatro ya se van recuperando. O sea, el buen ánimo dura y, por el contrario, el mal ánimo dura menos. No está mal.
Al comienzo del campeonato, como Suiza gana a España e Inglaterra empató con Estados Unidos, pues el ánimo de las hinchadas estaba parejo y bastante triste. Sin embargo, a partir de entonces el ánimo de los hinchas españoles va mejorando hasta la final y después de la final con el triunfo en la Copa del Mundo, mientras que el ánimo inglés oscila entre malo y muy malo después de la eliminación por Alemania.
Pero, por otra parte, todos estos cambios de ánimo según los resultados no varían en absoluto la identificación de los hinchas con sus equipos y, ganen o pierdan con el buen o mal ánimo que provocan en sus seguidores, estos siempre están con su equipo. Y, además, los hinchas españoles tienen más vida social después del campeonato, dedican más tiempo a estar con la gente y, también, gastan más dinero, algo así como un 20% más.
*Jones, M.V. y 4 colaboradores. 2012. Just a game? Changes in English and Spanish soccer fans’ emotions in the 2010 World Cup. Psychology of Sport and Exercise 13: 162-169.