Los animales se comunican entre sí por medio de muchos y variados mecanismos. Las señales más habituales transmiten el establecimiento de un territorio, la defensa de los depredadores, la reproducción o la localización de recursos. Los sistemas de comunicación implican la participación de todos los sentidos: pueden ser visuales, acústicos, olorosos, gustativos, táctiles o mezclas de varios de ellos. Mamíferos, aves, reptiles y anfibios tienen papada. Las funciones son diversas: por ejemplo, la coneja, a diferencia del conejo, tiene una gran papada que utiliza para obtener pelo con el que tapiza el nido para sus crías. También nuestra especie tiene papada, sobre todo en personas obesas y de cierta edad; es un lugar más de almacenamiento de grasa.
En los lagartos, la comunicación ha evolucionado hacia exhibiciones complejas de extraordinaria diversidad. Y entre esos sistemas de comunicación está la papada, un ejemplo clásico de sistema complejo de señales, cuya evolución y función exacta son poco conocidas en los lagartos del género Anolis.
Como describen Kirsten Nicholson y sus colegas de
Sin embargo, los autores no consiguen aclarar qué señal transmite la papada de los Anolis. Es un estudio morfológico y, aunque parece que el mensaje se refiere al territorio que domina cada macho, todavía queda trabajo por hacer.
Ante la falta de datos nuevos, nos queda la estadística y sus correlaciones. Bieke Vanhooydonck y su grupo, de
*Nicholson, K.E., L.J. Harmon & J.B. Losos. 2007. Evolution of Anolis dewlap Diversity. PLoS ONE 3: e274.
*Vanhooydonck, B., A. Herrel, R. Van Damme, J.J. Meyers & D.J. Irschick. 2005. The relationship between dewlap size and performance changes with age and sex in a Green Anle (Anolis carolinensis) lizard population. Behavior Ecology and Sociobiology 59: 157-165.