Ya en otro blog traté de este famoso refresco de inequívoco origen y sabor americano, copiado en el mundo entero, y uno de los símbolos de la globalización; “la chispa de la vida” y mucho más, como a continuación veremos. Y además con nuevas noticias.
Hay métodos anticonceptivos vaginales conocidos desde la antigüedad. Los egipcios recomendaban miel y bicarbonato y, en el discurrir de la historia, el zumo de naranja o de limón o aceites de variados orígenes han formado parte importante de muchas recetas. Pero el uso de la Coca Cola como anticonceptivo no puede tener más de un siglo de historia; y todavía se usa en países en desarrollo. En 1985, la doctora Sharee Umpierre y sus colegas, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, publicaron un estudio sobre las propiedades anticonceptivas de la Coca Cola. Es más, en aquellos años comenzó la comercialización de diversos tipos de Coca Cola: la Classic frente a la New Coke, la Sin cafeína y la Light, también llamada Diet. Y había ciertas dudas entre los usuarios sobre la eficacia espermicida de estas nuevas variedades. La doctora Umpierre y su equipo estudiaron la movilidad del esperma en presencia de estos refrescos y encontraron que todas las muestras reducían la movilidad, alcanzado la Light el 100% de reducción, la New el 41,6%, la Sin cafeína el 16,6%, y la Coca Cola de toda la vida el 8,5%. Estas diferencias no se deben al pH pues en todas las muestras era de 2,4. Los autores sugieren que la diferencia está en la “fórmula secreta” de la Coca Cola.
Pero dos años después, en 1987, se publicó en nuevo trabajo sobre la Coca Cola y sus propiedades anticonceptivas con resultados muy diferentes a los encontrados por Umpierre y sus colegas. Los autores eran el doctor C.Y. Hong y su equipo, del Hospital General de Veteranos de Taipei, en Taiwan. Probaron la Coca Cola clásica, la Sin cafeína, la New, la Diet y, además, la Pepsi Cola. Ninguna sobrepasó el 30% en la inmovilidad de los espermatozoides. La más potente, la Diet. Los autores dudan sobre la razón de que estos datos sean tan diferentes a los procedentes del estudio de Harvard, pero recomiendan no usar la Coca Cola como espermicida vaginal.
Pero las últimas noticias sobre el uso de la Coca Cola como espermicida no son halagüeñas. Deborah Anderson, de la Universidad de Boston, no está muy convencida de que su uso como tal sea eficaz. Según la Dra. Anderson, desde hace más de 50 años se ha considerado que el pH bajo de la bebida y la utilización de la botella, por su forma, como “agita y aplica” hacían del refresco un buen sistema anticonceptivo. Pero la autora, además de mezclar semen y refresco y observar que los espermatozoides se inmovilizan en un minuto, asegura, que la velocidad de estos, unos 18 centímetros por hora, puede hacer que escapen de la Coca Cola administrada después del coito. Sugiere que se administre antes del coito pero este método supone diluir en un compuesto acuoso el fluido vaginal indispensable para un coito por lo menos agradable. Quien haya copulado en una piscina o en el mar sabe, por propia experiencia, que el exceso de agua a veces provoca un aumento de fricción, traumas e incluso el peligro de infecciones. Y no digo nada de la habilidad y agilidad que hay que demostrar si se pretende administrar la Coca Cola justo después de la eyaculación y con toda rapidez, intentando que los espermatozoidez no se escapen y se adentren por donde no deben. En resumen, que según la Dra. Anderson, hay mejores métodos anticonceptivos que la Coca Cola; lo mejor es consultar al médico y aplicar métodos más tradicionales y realmente eficaces.
Y ya que estamos con espermicidas vaginales, no hay que olvidar que las investigaciones buscando nuevos productos siguen en la actualidad. Así, en 2002, Fu-Xia Zhang y sus colaboradores, médicos especializados en planificación familiar, del Hospital de Xian, en la República Popular de China, publicaron un trabajo sobre las excelentes propiedades espermicidas, de origen desconocido, del extracto de lombrices de tierra, sin precisar la especie ya que el producto se consigue a base de triturar todas las encontradas en el suelo. El extracto, aplicado en el momento oportuno, provoca la detención rápida de los espermatozoides, su aglutinación y, en consecuencia, la inactivación.
Y como despedida, una poesía, titulada Empleo de la nostalgia, de Ángel González, que cita muy oportunamente la Coca Cola.
Amo el campus
universitario,
sin cabras,
con muchachas
que pax
pacem
en latín,
que meriendan
pas pasa pan
con chocolate
en griego,
que saben lenguas vivas
y se dejan besar en el crepúsculo
(también en las rodillas)
y usan la coca cola como antoconceptivo.
Además de espermicida, la Coca Cola tiene otros usos sorprendentes. Por ejemplo, en el estudio de los micronutrientes del suelo. Conocer los componentes del suelo y su concentración es un paso esencial, por ejemplo, para planificar los fertilizantes y abonos necesarios para cada cultivo. Para ello, hay que extraer los nutrientes del suelo y someterlos a análisis en el laboratorio. Y extraer los nutrientes no es cosa fácil. Se utilizan varios métodos: AAAc-EDTA, que son las siglas de acetato de amonio, ácido acético y ácido etilendiamintetraacético; o el DPTA, abreviatura del ácido dietiltetraminpentaacético; o los métodos basados en el ácido fosfórico. Pero el grupo de Ewald Schnug, del Centro Federal de Investigación Agrícola de Braunschweig, en Alemania, lleva varios años estudiando el uso de Coca Cola para extraer los nutrientes del suelo. Y han encontrado que funciona muy bien para el análisis de metales pesados como el hierro, el cobre, el zinc y, sobre todo, el manganeso. Schnug y sus colegas creen que los componentes de la Coca Cola, como el ácido fosfórico, el azúcar y el anhídrido carbónico, intervienen en su eficacia en la extracción de metales. Sin embargo, añaden que es muy importante que la composición de la Coca Cola esté muy bien controlada y, para confirmarlo, han utilizado 55 muestras del refresco, procedentes de 18 países. Sus resultados indican que la composición de la Coca Cola es muy consistente y se mantiene en todas las muestras. En resumen, que la Coca Cola es un compuesto muy recomendable para el análisis de nutrientes en el suelo por la sencillez del método, por ser asequible en cualquier parte del mundo, por ser barata, por ser de uso seguro y no suponer ningún impacto ambiental.
*Anderson, D. 2008. Coca-Cola douches and contraception. British Medical Journal 337: 1454.
*Hong, C.Y., C.C. Shieh, P. Wu & B.N. Chiang. 1987. The spermicidal potency of Coca Cola and Pepsi Cola. Human Toxicology 6: 395-396.
*Schnug, E., J. Fleckenstein & S. Haneklaus. 1996. Coca Cola is it! Ther ubiquitous extractant for micronutrients in soil. Communications in Soil Science and Plant Analysis 27: 1721-1730.
*Schnug, E., J. Fleckenstein & S. Haneklaus. 1998. Factors affecting available micronutrient concentrations in soil using Coca Cola as extractant. Communications in Soil Science and Plant Analysis 29: 1891-1896.
*Umpierre, S.A., J.A. Hill & D.J. Anderson. 1985. Effect of “Coke” on sperm motility. New England Journal of Medicine 313: 1351.
*Zhang, F.-X., B.-Z. Guo & H.-Y. Wang. 2002. The spermatocidal effects of earthworm extract and its effective constituents. Soil Biology and Biochemistry 24: 1247-1251.