Hace tiempo hablé de retretes; hoy sigo con ello pues me han llegado inquietantes noticias de Inglaterra. Jose Philip y su grupo, del Hospital Leighton, de Crewe, están preocupados, y así lo expresan, sobre los nuevos retretes de diseño, con pesadas tapas de madera, cerámica o de cualquier otro material ornamental (incluso acero), que se han convertido en un serio problema para los niños que recién han aprendido a usar solos este esencial aparato del cuarto de baño. Sus colegas de otros hospitales están de acuerdo. Hasta cuatro niños, de dos a cuatro años de edad, han pasado por el departamento de urgencias del hospital, con el pene roto pues cuando estaban orinando, la pesada tapa cayó de improviso sobre tan importante órgano provocando dolorosas heridas. Felizmente, la rotura no era grave y, después de aliviar el dolor y curar la herida, los niños pudieron ir a casa al día siguiente.

Para evitar más heridos, los autores proporcionan cuatro recomendaciones a seguir:

1.- Los padres deben ajustar la tapa para que, en caso de caída repentina, ésta sea lenta y fácilmente esquivable.

2.- Las tapas pesadas deberían estar prohibidas en hogares con niños pequeños.

3.- A pesar de lo que indica la buena educación, quizá en estas casa los niños podrían dejar la tapa levantada al terminar la micción.

4.- O podría ser que los padres sujetaran la tapa mientras los hijos orinan hasta que estén seguros de que ellos mismos lo pueden hacer sin peligro.

Considero que siguiendo estos sencillos consejos, el peligro disminuirá y el niño podrá acudir al cuarto de baño con menos peligro y más confianza.

*Philip, J., S. Bicha, E. Mamood, M. Sorur, K. Ananthakrishnan & P.P. Irwin. 2008. Public interest warning: Should we ban wooden/ornamental toilet seats for male infants? British Journal of Urology International 102: 1749.