ARABA
La ciudad huele a fiesta. Lo notan desde hace días blusas y neskas pero también quienes arreglan sus trajes, los hosteleros y los hoteleros, los encargados de levantar los escenarios, los conductores de Tuvisa, el propio Celedón… e incluso su versión en resina de poliéster y fibra de vidrio, que fue presentada hace ya unos días en sociedad. Todos están más que listos –dos veranos en casa ayudan a concienciarse– para el comienzo hoy de La Blanca. La mayoría, de hecho, lleva unas cuantas semanas de preparación para que, desde esta tarde, no falle nada.