ARABA
Pedro Ruiz, que dirige Alma Carraovejas, relata a EL CORREO que hace años en una visita a Rioja Alavesa empezó a «soñar» con adquirir «algún día» este edificio que lleva demasiado tiempo abandonado y en ruinas. La ilusión se tornó en realidad en 2021 y ahora se está realizando una investigación a través de la Fundación Cultura Líquida, una entidad que forma parte del mismo grupo y que se dedica a preservar el patrimonio ligado al vino.