No pasaba inadvertida en el entramado de vías que vertebran la ciudad. El intenso humo delataba la presencia de la locomotora a vapor 140-2054 en la Vía 12 (aunque acabó saliendo de la 6) de la estación ferroviaria, donde se dieron cita cientos de mirandeses desde primera hora de la mañana. No querían perderse un viaje histórico, aunque fuera solo para despedir desde el andén a las 350 personas que habían sacado su billete hasta Alsasua.