Álava
Vuelva usted mañana. La frase que Larra hizo célebre para caricaturizar la lentitud de la burocracia parece ser la única respuesta que el Alavés, en una situación económica crítica, recibe cada vez que topa con su deseo comenzar a ingresar dinero a través de la Diputación, algo que no sucede desde hace tres años. La misma entidad que hasta 2006, incluso con Piterman en la presidencia y un agujero fiscal creciente, incluía con naturalidad un millón de euros en el convenio con el club albiazul, exige ahora todo tipo de requisitos a los dirigentes del Paseo de Cervantes. (+info)