La mujer de la foto es una heroína. O quieren que lo sea. Puede ser la primera Presidenta de la historia de la República Dominicana. Es Margarita Cedeño de Fernández y ya le han hecho los carteles para el futuro: “Presidenta 2012-
En Latinoamérica las restricciones al número de mandatos que puede tener un presidente – por lo común dos, a veces sólo uno, como sucede en México – crean situaciones confusas. Si el presidente de turno lo hace más o menos bien, o siente que cuenta con respaldos, busca últimamente saltarse la limitación legal, a veces por la vía de cambiar la Constitución. Estos intentos son cada vez más frecuentes, quizás porque América Latina vive su etapa de mayor estabilidad política. De ahí la cantidad de sitios en que se van completando los mandatos.
Los intentos de saltarse el límite de dos legislaturas provocan sobresaltos e inquietudes, por la impresión de que la Constitución puede acomodarse a las apetencias concretas del mandatario. Con una presión adecuada puede convertir en papel mojado lo que se consideraba un pilar de la Constitución.
Hay otra vía curiosa para mantenerse en el poder desde el poder. Es la del cartel, el intento heroico de sobrevivir (en el mando) por vía marital, cuando el Presidente busca que elijan a su esposa, a veces sin experiencia – no parece ser el caso de Argentina, donde Cristina Fernández de Kirchner tiene su propio curriculum político, al margen de su esposo -. El caso de la República Dominicana es singular. La propaganda no sugiere un pedigrí político para la cónyuge, ni dotarle de un historial que la demuestre adecuada para el cargo. Lo que dice es que con Ella seguirá Él. Al presidente de ahora se le acaba su tiempo, pero Él quiere perpetuarse políticamente a través de Ella, y hasta deja claro que la (futura) presidenta electa será un paripé, para que Él – el jefe supremo – siga siendo Él a través de Ella. O quizás quiere decir que la esposa (Ella) está tan imbuida por espíritu del Marido (Él) que ni se notará el cambio. Pero Él es el protagonista de la elección de Ella.
Lo tenían ya claro cuando le reeligieron a Él en 2008. Se aprecia en el siguiente cartel.
Son cosas que pasan, los distintos caminos de la heroicidad. Aunque conviene no ser demasiado estrictos en el juicio. Al fin y al cabo, los resultados de las democracias europeas tampoco son muy boyantes en los últimos tiempos. Nada hay más deprimente en la política mundial que las fotos de los mandamases de la Unión Europea perfectamente alineados cuando se juntan. Tienen un aire siniestro. Al contrario que Margarita Cedeño. Los Ellos europeos (en general son Ellos) se les nota en la foto pensando en Ellos. En que cuando vean en su casa tal foto correrán a votarles a Ellos.
Las democracias latinoamericanas, bullangueras y personalistas, tienen un punto más humano que esos veintitantos individuos en general vestidos de gris, con mirada de triunfadores, pero quizás haya un punto intermedio entre Él, que quiere reelegirse a través de Ella, y los Ellos con aspecto taimado de burócratas de partido.