Los más veteranos del lugar, seguramente os acordaréis de un título emblemático para los primeros PC en el que podíamos encarnar al entrenador del equipo de fútbol de nuestros amores. Si, me refiero a PC Fútbol, de la añorada Dinamic. Sin duda, la saga ‘made in Spain’ más vendida de todos los tiempos. Y es que este juego era la contrapartida ideal para arcades tipo Fifa. Nos daba la posibilidad de decidir la estrategia y alineación de un sinfín de plantillas de varias categorías, además de poder hacernos con los mandos durante el partido para ayudar a nuestros chicos a lograr la victoria final. Y todo ello con los divertidos comentarios de Michael Robinson, que se convirtió en el rostro de una franquicia que ya no fue la misma desde la desaparición de la desarrolladora española. En otras palabras, los bugs y los parches fueron tan numerosos que terminaron por desesperar a sus usuarios. Una pena.
Pues bien, si eras un fiel seguidor de PC Fútbol, estás de enhorabuena porque su sucesor es Football Manager 2009, que SEGA acaba de lanzar para ordenadores compatibles, MAC y PSP: Hay que agradecer a su desarrolladora, Sports Interactive, su trabajo por mejorar su producto a lo largo de los años hasta lograr que sea accesible para todos los públicos. Y todo eso gracias a un lavado de cara de su interface que hace que podamos tomar cualquier decisión relativa a nuestro club con total facilidad. Pero cuidado, porque eso no significa que estemos ante un juego sencillo. Todo lo contrario. Fichar a un jugador puede ser una auténtica pesadilla porque, aunque lleguemos a un acuerdo con su club, puede que al futbolista no le interesen nuestras condiciones o que otro equipo se lo lleve en el último momento. Además, nuestras estrellas se lesionarán o recibirán tentadoras ofertas para cambiar de aires. ¿Os suena?
Como no podía ser de otra forma, Football Manager 2009 deslumbra por su brutal base de datos que incluye equipos de 51 países, muchos de ellos latinoamericanos, con sus correspondientes categorías. Pero el verdadero reto no es hacernos con las riendas de un equipo grande, sino partir de un modesto hasta convertirlo en el más poderoso de Europa a golpe de fichajes. En ese sentido, hay que destacar el gran trabajo realizado por plasmar las plantillas reales que disputarán, además de las ligas nacionales, competiciones continentales como la Champion o la UEFA, llamadas de otra forma por un problemilla de licencias. Eso sí, en el caso de que no cumplamos con nuestros objetivos, tanto deportivos como económicos, marcados al principio de la temporada, nos encontraremos con una nada cariñosa carta de despedido por parte de la directiva. Más realismo, imposible.
Pero el punto clave, presente en esta saga por primera vez, es la posibilidad de ver cómo se comporta nuestro equipo en un terreno de juego. En este sentido, contamos con unos más que correctos gráficos tridimensionales con unas animaciones bastante apañadas para que el espectáculo sea más realista que nunca. De esta manera, si vemos que nuestros chicos no lo hacen tan bien como habíamos previsto, podemos modificar la estrategia inicial, realizar cambios, dar charlas a los jugadores en el descanso o cambiar nuestro dibujo táctico, entre otras muchas opciones. Eso sí, hay que recordar que no estamos ante un Fifa o un PES, por lo que no tendremos la posibilidad de enmendar nuestros errores interviniendo directamente en el juego. Asistiremos, impotentes, a todo lo que suceda sobre el césped, aunque después nos podemos desquitar con los periodistas en la sala de prensa. Si, porque hasta eso incluye Football Manager 2009, el juego de estrategia balompédico más grande de todos los tiempos. Y que dure.