Un juego no apto para cardiacos. Así es Dead Space, que ha llegado recientemente a las tiendas de la mano de EA para PC, Xbox 360 y PS3. Un survival horror de los que hacen época ambientado en una nave espacial muy al estilo Alien: el octavo pasajero. Y es que no se puede negar que sus creadores han querido hacer su particular homenaje a esas películas de terror-ciencia ficción que tanto nos gustan. De nuevo, los videojuegos se nutren del cine y viceversa. Por lo tanto, tenemos ante nosotros un título de sangre y vísceras sin concesiones a los estómagos blandos y que también bebe, como no podía ser de otra forma, de las grandes joyas del género cibernético como Resident Evil o Doom 3 para crear una obra con personalidad propia y que en más de una ocasión nos hará poner los pelos de punta.
El argumento no es que sea muy original. La Tierra ha perdido contacto con un carguero espacial que tenía como misión la obtención de materias primas de otros planetas. Como los altos mandos creen que se trata de un problema de comunicaciones, envían otra nave con técnicos para realizar las oportunas reparaciones. Pero cuando llegan a la USG Ishimura se dan cuenta de que los cuerpos desmembrados no hay ya quien los arregle. Es entonces cuando realmente empieza nuestra aventura, encarnando al ingeniero jefe Isaac Clarke, por sobrevivir en una auténtica pesadilla gore provocada por unos alienígenas con muy mala leche que se adueñan de los humanos, incluso si están muertos, para convertirlos en asesino psicóticos, mientras que otros optan por suicidarse enloquecidos de terror ante lo que se les viene encima.
Por si fuera poco, hay que tener en cuenta que nuestro personaje no es un fornido marine. Contaremos con armas, como un lanzallamas o un rifle intergaláctico, pero no esperéis un macrocañón de plasma ni nada parecido. En más de una ocasión, tendremos que escapar por piernas de las encerronas alienígenas si queremos sobrevivir. Por fortuna, contamos con un traje espacial para dar paseos por el exterior de la nave y algunos poderes, que no tienen que envidiar a los de un caballero jedi, como la posibilidad de mover objetos a distancia o hacer que todo se mueva a cámara lenta. Combinando todos estos elementos, deberemos enfrentarnos a auténticos monstruos que se resisten a morir salvo que antes sean convenientemente desmembrados para quitarles su fuerza vital. Vamos, gore total, lo que hará las delicias de los amantes del género entre los que me incluyo, pero que ha provocado su censura previa en países como Alemania o Japón.
En total, el juego está dividido en 12 episodios. En cada uno de ellos, deberemos alcanzar ciertos objetivos encaminados a hacer que la gigantesca nave vuelva a estar operativa y exterminar a los alienígenas. Es en estas misiones cuando podemos disfrutar del espectacular festival visual tanto en los repugnantes modelados de los personajes como en los siniestros escenarios por lo que deberemos pasar sin ralentizaciones gracias a un más que sobresaliente motor gráfico Y también merece una mención especial el aspecto sonoro, en los que susurros, gritos y demás lamentos contribuirán a crear una enorme sensación de desasosiego. En definitiva, una nueva joya para el género de los survival horror, que incluye también un cómic y una película de animación que narra la historia del USG Ishimura. Toda una pesadilla más allá del sistema solar.