Pues eso, que en nombre de mi compañero Pablo y del mío propio os deseamos de corazón unas felices fiestas en compañía de vuestros seres queridos, tanto de carne y hueso como cibernéticos, y que el Olentzero os traiga muchos juegos. Por cierto, en el vídeo veréis a una amiga que también os quiere felicitar la Navidad.