No me puedo imaginar un disco grabado a medias entre Lou Reed y Metallica, o entre Metallica y Lou Reed, porque aquí cada cual tendrá ganas de dar prioridad a su favorito. Y supongo que eso, el hecho de que resulte muy difícil hacerse una idea de lo que puede dar de sí esa bonita amistad, hace que el proyecto sea realmente interesante: «Llevamos trabajando en nuestro estudio casero desde hace unos meses, hemos grabado diez canciones y, aunque no estamos muy seguros de cuándo podréis escucharlas exactamente, tenemos muchas ganas de compartir con vosotros todo lo que hemos grabado», ha anunciado Metallica sobre esta desconcertante colaboración con el granítico Lou, con el que ya tocaron en el 25 aniversario del Rock And Roll Hall Of Fame.

Estoy deseando escuchar lo que ha salido del encuentro, que toma como base composiciones de Lou Reed, aunque me ha hecho gracia la afirmación de Rolling Stone, que sitúa el disco como algo intermedio entre el Berlin del uno y el Master Of Puppets de los otros. Me encantan ambos, pero hace mucho que los implicados no se mueven a ese nivel: a lo mejor les ha quedado una rara combinación entre Hudson River Wind Meditations, el álbum de Reed para hacer taichí, y Reload. Que también estaría curioso, la verdad.

De las canciones que tocaron juntos se ha visto más Sweet Jane, pero también hicieron este White Light/White Heat que deja un poco más de espacio a Metallica para hacer lo suyo…