Ça plane pour moi, de Plastic Bertrand, siempre fue una canción con cierto aire de rareza: un festivo pelotazo de espíritu punk, aroma surf y sonido nuevaolero de 1977, en francés, firmado por un belga, que ha sobrevivido con salud a los vaivenes del gusto y sigue funcionando como un tiro cada vez que suena en un bar o en un anuncio. Pero la rareza iba más allá, porque Ça plane pour moi era la segunda versión del tema: la primera, Jet Boy Jet Girl, de Elton Motello, se juzgó demasiado aventurada porque su letra hablaba de felaciones y sexo entre chicos, así que los productores decidieron reciclar las bases, que les habían quedado tan bien, y poner como vocalista al batería de la banda de Motello con una letra que no les diese ningún problema. Más que nada, porque es incomprensible.

Pero la que se ha montado ahora es rizar el rizo. Uno de los autores de la canción y productor de todo aquello, Lou Deprijck, llevaba mucho tiempo reclamando ante los tribunales que el pinturero Bertrand no llegó siquiera a cantar en aquella segunda versión, porque la voz corresponde al propio Deprijck. Un lingüista experto se ha tirado años revisando la canción y ha concluido que el vocalista tenía acento Ch’ti (un dialecto septentrional que conocerán si han visto la divertida peli Bienvenidos al norte) o de la Picardía, pero que en ningún caso podía tratarse de un tío de Bruselas. Finalmente, Bertrand ha admitido amargamente en Le Soir que nunca llegó a cantar en la grabación, pero ha puntualizado que él es “la víctima”, ya que le manipularon como quisieron.

Qué buen momento para recuperar el Jet Boy Jet Girl de Motello, que sí fue la gran víctima desde el principio. Y todos a bailar. Y a cantar las diversas variantes de “he gives me head”, esa frase que tanto asustó a los productores y que, desde luego, es bastante más punk que Ça plane pour moi.