Juan Rivas es un peculiar artista gallego que habita un mundo propio. Desde sus tiempos con el grupo Estereoceáno, se ha ido fabricando un estilo personal e inconfundible, un cóctel –esta palabra resulta casi ineludible al hablar de él– que suele tener como base la música brasileña pero la aliña con arreglos imaginativos de música de salón y una buena dosis de Movida ochentera: por su timbre de voz, también resulta casi ineludible mencionar a Golpes Bajos, de quienes se olvida a menudo su ramalazo tropical, tan evidente en temas como Colecciono moscas o Escenas olvidadas. ¿Que ustedes son rockeros y no les motiva mucho tanta calidez y sofisticación? Ya, seguramente a mí me pasaría lo mismo si me hubiese limitado a leer la fórmula, pero por el mismo precio pueden escucharla y, si se animan, bailarla: Rivas regala en su MySpace su nuevo álbum, Superdiscotropical, y les aseguro que todo esto que les he contado resulta mucho más efectivo cuando suena. Ocurre un poco lo que se ve en este vídeo, que uno acaba tropicalizando su casa y queriendo inflarse a caipiriñas.