
A veces esto de la canción de la semana me supone meterme en un berenjenal, porque no tengo la más remota idea de quiénes son los artistas que elijo. Es el caso de hoy: en cuanto escuché Room at the Top (bueno, en cuanto escuché sus primeros diez segundos), tuve claro que quería traerla por aquí, pero no había oído hablar jamás de Quatermass III y ahora mismo, tras un ratillo de investigación, tampoco es que sea un erudito en la materia. Parece claro que se trata de un quinteto británico y que sus miembros tiene cierta veteranía acumulada en otros proyectos (Earl Brutus, World of Twist, The Dials), y también que les gusta actuar vestidos con monos de astronauta o algo así, un detalle que siempre es un plus. Y, en fin, citan en su ensaladilla de influencias a The Fall, Suicide, Psychic TV, Roxy Music, Hawkwind, Slade, Status Quo y Monty Python, así que nada puede salir mal.
Room at the Top es el adelanto de su álbum de debut y está inspirada en Bilenio, un cuento de J.G. Ballard sobre un mundo superpoblado en el que el uso del espacio físico está severamente regulado, pero dos amigos tienen la suerte de encontrar una habitación grande y vacía por un error administrativo. «Es una historia desoladora, pero la canción no tiene nada de desolador», puntualiza la banda. Y es verdad, a mí me suena como una jam entre Timber Timbre y Chrome Cranks con Martin Rev a los teclados, o sea, una fantasía resultona y adictiva.