Esta es una de esas semanas en las que tengo sobreabundancia de candidatos para la canción de la semana: por ahí han andado Adele & The Chandeliers, Alex Maas y Mastodon (¡con el orate máximo Gibby Haynes como invitado!), y puede que alguno de ellos acabe regresando en entregas venideras, pero al final me he quedado con la más improbable del lote, porque a veces tengo que corregir esa tendencia mía a elegir como canción de semana lo más pop, lo más ajustado al concepto de canción. Así que aquí tenemos al quinteto franco-suizo Mauvais Sang, Mala Sangre, igual que el poema de Rimbaud y la peli de Leos Carax.

Mauvais Sang es un grupo joven y ambicioso que intenta no encuadrarse y evitar así el estrangulamiento estilístico: se ubican a sí mismos entre el noise rock, el post-punk y la clásica contemporánea y son una de esas bandas sin prejuicios que hacen compatible el arpa y las guitarras metaleras, la furia disonante y las referencias literarias. Aquí vamos a escuchar su faceta más contundente: a mí, este Décor que les ha servido como adelanto de su nuevo EP (que, a su vez, es la primera mitad de un álbum completo) me suena como si Dominique A cantase con The Young Gods, una combinación que –además de sonar la mar de sugerente desde el punto de vista teórico– nos permite ceñirnos al carácter franco-suizo del asunto. El poco francés que aprendí en el cole (sí, soy así de viejo) se borró hace ya mucho tiempo, pero leo que la letra trata sobre «la perdición de un joven en un club nocturno» y que se inspira en «la visión brutal, animal y competitiva» de este tipo de locales que aparece en las novelas Las partículas elementales y Ampliación del campo de batalla de Michel Houellebecq.