Si alguien se hubiese jugado su dinero hace treinta y tantos años a que, en 2017, íbamos a tener álbum nuevo de Peter Perrett, seguro que las casas de apuestas le habrían pagado cien a uno. El líder de The Only Ones, uno de los santos de cabecera de este blog, está entre los supervivientes más improbables de la historia del rock: «Siempre flirteo con la muerte», empieza la letra de su canción más conocida, y en su caso no era un verso de postureo malditista. Perrett, un hombre de aspecto frágil y melancólico, se sometió durante años a una dieta química un tanto desmesurada (miren, aquí hablamos de ello) que convertía su vida cotidiana en un inconcebible caos. Pero no solo continúa aquí, entre nosotros, sino que está a punto de sacar disco nuevo y, qué les voy a decir… ¡ya quisieran muchos ese nivel!
Se supone que es su primer álbum en solitario, porque aquel proyecto que bautizó Peter Perrett In The One no se considera como tal, y lo ha grabado respaldado por sus hijos Jamie y Peter Jr. Primero presentó How The West Was Won, una canción que saqueaba amigablemente el Sweet Jane de Lou Reed (las maquetas de los Only Ones colaron una vez como grabaciones perdidas de la Velvet), pero este segundo adelanto, An Epic Story, nos sitúa ya en el centro de los dominios de Perrett, ese mundo vulnerable y rematadamente sentimental. En realidad, la canción cuenta una historia romántica, porque está dedicada a Zena, su esposa desde hace 47 años, pero es verdad que en su caso el amor tiene bastante de épica, ya que en su momento tuvo que ser heroico soportar al Peter más extraviado y a su excitable amante Lucinda. «Siempre seré tu hombre, / nadie podría quererme como lo haces tú. / Si pudiese vivir de nuevo mi vida entera, / te elegiría a ti cada una de las veces», dice ese estribillo que resplandece. Si la apuesta hubiese incluido que Perrett iba a publicar un nuevo clásico en 2017, yo creo que nos habrían dado doscientos a uno.