Muere Paloma Chamorro | Evadidos - Blog elcorreo.com >

Blogs

Evadidos

Muere Paloma Chamorro

Para mí, Paloma Chamorro era el personaje central de lo que se llamó Movida, una estrella de cabello inconcebible alrededor de la que orbitaban todos aquellos creadores fascinantes, empeñados en marcar el cambio de época con su obra y con su vida, y también todos aquellos diletantes y hedonistas que aportaban ambiente y burbujas al movimiento. Puede parecer raro que una periodista desempeñe ese papel nuclear en un fenómeno cultural, pero al menos yo lo veía así desde mis circunstancias, y me temo que no me queda más remedio que ponerme autobiográfico otra vez. En 1983, cuando se empezó a emitir su programa, La edad de oro, yo era un chaval de 12 años de un barrio obrero de Logroño y justo comenzaba a interesarme por la música. Para ver a Paloma Chamorro tenía que emigrar a la vieja tele en blanco y negro, que había quedado arrumbada en un rincón de mi habitación, y la encendía como quien pone en marcha un intercomunicador con otro universo: partiendo de esa cabecera en la que se veía una teta (sé que esto puede resultar tragicómico hoy en día, pero no lo era en absoluto para un adolescente de entonces), por la pantalla desfilaba un mundo que no tenía nada que ver con mi entorno. Los grupos españoles y extranjeros (y qué grupos, de Siniestro Total a The Smiths, de Parálisis Permanente a los Residents…) se repartían el tiempo con reportajes a menudo desconcertantes sobre arte y, sobre todo, con entrevistas en las que todo el mundo salía muy contento y hablaba de cosas muy raras. Tenía todo la sana imprevisibilidad de lo amateur pero, a la vez, latía siempre una evidente pasión por la cultura pop, que resultaría inútil buscar en ningún rincón de la televisión actual, extraviada entre la pose ambiciosa de los triunfitos y el picoteo irónico de los cachitos. Como yo, habría miles de mocosos por toda España que pudieron disfrutar así de su pequeña porción de Movida y que hoy siguen experimentando las secuelas (benéficas, creo) de aquel contacto iniciático.

Paloma Chamorro murió ayer a los 68 años. Desde que se retiró, era poco amiga de aparecer en los medios: una de sus escasísimas entrevistas, quizá la última, se la concedió hace unos años a las compañeras Isabel Ibáñez y Yolanda Veiga para su libro Religión catódica. 50 años de televisión en España. «Cuando llegué con mi programa, todo era en playback; los sábados ponían Aplauso, que me horrorizaba, pero salían los Ramones. Les veía mover la boca y se me saltaban las lágrimas. Yo pensaba ‘nunca más’, pero al poco actuaba Roxy Music y volvía a picar. Y otra vez moviendo la boca. Hice La edad de oro porque quería a los músicos haciendo música en televisión, no el paripé», les contó, entre anécdotas sobre «la pilila» de Stiv Bators o los New York Dolls en los toros. Admitía Paloma en aquella entrevista que lloró de emoción con el concierto de The Durutti Column en su programa, así que vamos a despedirnos de ella con un fragmento de esa música siempre melancólica y vulnerable.

 

Por Carlos Benito

Sobre el autor

Periodista de El Correo. Nací en Logroño, estudié en Pamplona, vivo y trabajo en Bilbao.


enero 2017
MTWTFSS
      1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
3031