Estoy pesadito con las ediciones especiales, vive Dios, pero a principios de mes me di cuenta de que la inmensa mayoría de los conciertos que iba a seleccionar correspondían a la Aste Nagusia, así que pensé que era mejor ceñirse a esos nueve días de desenfreno y zapatillas sucias. Como a casi todo el mundo, a mí también me parece bastante birrioso el programa oficial de este año, pero, por fortuna, cada vez abundan más las propuestas alternativas para que cada cual pueda confeccionarse unas fiestas a medida. He mantenido la norma sagrada del blog de no repetir escenario: me han salido dos citas del programa oficial, dos de las txosnas y tres de la iniciativa privada. Y queda bien variadita la cosa.
Los Suaves (sábado 22, Abandoibarra). Sé que hay gente que ve a Los Suaves como una abominación, una fea apoteosis del viejunismo y el merchandising propio: mi primo, sin ir más lejos, les aplicó recientemente el adjetivo “execrables”, y lo hizo, además, tres veces seguidas y en mitad de un concurrido bar heavy. Pero yo tengo al grupo orensano en gran estima, he machacado algunos de sus discos (bueno, me temo que eran casetes grabadas) y creo que siempre hay que reivindicar la lírica derrotista y necrocéntrica de Yosi. Además, es su (segunda) despedida de Bilbao, así que no faltaré. Y lo más divertido es que mi primo tampoco.
MoonShakers y Adam Giles Levy (martes 25, Bilborock). Lo ideal en la muestra de rock local es acudir a todos los conciertos que se pueda, porque es el entorno con mejor ambiente de todas las fiestas: creo que, a estas alturas de la historia, ya no procede evocar aquellos tiempos de la plaza de Unamuno que me cautivaron cuando me mudé a Bilbao, pero, glups, me temo que acabo de hacerlo otra vez. En fin, había que seleccionar algún concierto y me he quedado con este, que junta un poco contra natura el rock de herencia sesentera de las MoonShakers con las canciones atmosféricas e intimistas de Adam Giles Levy, elegante británico trasplantado a Getxo.
Fuzz (martes 25, Kafe Antzokia). El Antzoki nos trae a la estrella internacional de la Aste Nagusia: Ty Segall, el hiperactivo multiinstrumentista californiano que recupera en su proyecto Fuzz la electricidad peligrosa y las emanaciones embriagadoras de finales de los sesenta y principios de los setenta, con influencias como Black Sabbath, Stooges o Blue Cheer. Son los señores peludos de la foto de arriba y tuvieron canción de la semana en esta casa. Telonean Inoren Ero Ni, con su post hardcore siempre alérgico a lo fácil.
Chimo Bayo (martes 25, Pinpilinpauxa). La Pinpi es un paraíso de la purpurina y la diversión sin prejuicios. Sus responsables nos regalaron el año pasado la memorable visita de Los Ganglios y, para este, han disparado una andanada mortífera que incluye a Ojete Calor, Leticia Sabater, Mamá Ladilla y el icónico Joaquín Bayo, mito de la ruta de bakalao y la electrónica bailable de finales de los ochenta y principios de los noventa. Supongo que algunos lo disfrutarán irónicamente, pero creo que no hace falta coartada chanante para apreciar sus himnos más durillos de electronic body music, tan emparentados con Front 242. ¿Vendrá con armadura galáctica?
Horn Of The Rhino y Anestesia (miércoles 26, Algara). La primera vez que vi a Horn Of The Rhino en directo (entonces se llamaban simplemente Rhino) fue precisamente en una Aste Nagusia, hace ya ocho años, como teloneros de los australianos Grey Daturas. La potencia de los bilbaínos y la intensidad mareante de los antípodas (y digo lo de mareante en sentido literal, porque salimos tambaléandonos) sumaron un concierto inolvidable. Este año el rinoceronte embestirá en Algara junto a los eternos Anestesia, tan noqueantes como siempre, y los jóvenes y también guipuzcoanos Voltaia.
Brighton 64 (sábado 29, Satélite T). En cuestión de meses, el local de Deusto se ha convertido en uno de los referentes imprescindibles de la escena bilbaína, y para su primera Aste Nagusia han preparado un menú tan sabroso y exquisito como los que suelen proponer para jamar. He dudado y sigo dudando qué noche destacar (Sex Museum, Nuevo Catecismo Católico…), pero creo que es de ley subrayar la presencia de los barceloneses Brighton 64, nombre mítico para todos los mods y también para algunos que jamás han pertenecido a la atildada tribu. Aquellos tiempos no volverán, como dice su canción, pero ellos siguen aquí. Completan el cartel los Lie Detectors.
Bilbao Deathfest (sábado 29, Baratz). Concluimos el repaso con una iniciativa gloriosamente idealista, hasta el punto de coquetear con el absurdo: Brutal Arratia Records organiza en el bar de Iturribide un festival de metal extremo que se extenderá desde las dos de la tarde hasta la una de la madrugada. Participan quince bandas (Mutilated Judge, Anthropomorphic, Sorgerth, Früst, los veteranos El Kaso Urkijo, Scrotovarios…), lo que significa que vendrá a haber tantos músicos como miembros del público, ya que solo se han puesto a la venta cincuenta entradas. No me digan que no es alucinante y, con perdón, romántico. Los antepenúltimos de la velada serán estos verracos llamados Görrinerh, reyes del goregrind berciano.