No, no tiene nada que ver con el imponente homenaje a Lou Reed que se prepara para esta noche en el Antzoki, aunque Berlin sea también mi disco favorito del neoyorquino en solitario. Los australianos The Peep Tempel son uno de esos grupos que he descubierto gracias a las listas de lo mejor de 2013, aunque no me pregunten quién fue el fenómeno que incluyó en su selección un EP de un grupo australiano con trescientos seguidores en Twitter. A lo mejor era una lista de los mejores epés del año en el post-punk australiano, no sé, pero el caso es que me encanta el disco: se titula Modern Professional, contiene cuatro canciones y suena  oscuro, nervioso, urgente y obsesivo. «Crudo, frenético e inflexible», lo describen ellos, así que por falta de adjetivos no será. The Peep Tempel son los tres muchachotes de la foto, editaron en 2012 su álbum de debut y tienen «uno de los mejores directos de Melbourne», o al menos eso dice su promoción que dijo Rolling Stone, y yo me lo creo, porque sus temas presentan las hechuras adecuadas para convertirse en una bomba en vivo. Podría haber elegido cualquiera de los cuatro, pero me quedo con su Berlin, que supongo tiene algo que ver con lo contentos que se quedaron tras tocar en la capital alemana. A mí me hace pensar en unos Dead Kennedys nuevaoleros, si es que eso tiene algo de sentido.