Llámenme absolutista, o totalitario, o cualquier otra palabra tremenda que se les venga a la cabeza, pero creo que hay canciones que deberían gustarle a todo el mundo. Y una de ellas es Mr. Blue Sky, de la Electric Light Orchestra, con su vocoder, sus coros, su ambiente beatleliano (¿se escribe así?) y esa luminosidad que se contagia de inmediato al ánimo del oyente. Cuenta Jeff Lynne que la compuso encerrado en un chalé de Suiza: «Estuvo oscuro y con niebla durante dos semanas y no se me ocurría nada. De repente, brilló el sol y dije: ‘Guau, mira esos hermosos Alpes’. En las siguientes dos semanas escribí Mr. Blue Sky y otras trece canciones».
Para celebrar un poco tardíamente el cuarenta aniversario de la ELO, Lynne está revisando algunos hitos de su producción, incluso regrabando partes, de cara a un recopilatorio que se publicará el 8 de octubre. Y, además, ha hecho un bonito vídeo para Mr. Blue Sky, que es a lo que vamos. Se trata, por supuesto, de un derroche de colores psicodélicos, con nubes cantarinas, bandadas de mariposas, ballet de florecillas y soles estroboscópicos. Lástima que no incluya la parte final de la canción.
Tengan paciencia con Vimeo, que a veces se pone terco para arrancar…