El sello Total Punk tiene un subsello llamado Mind Meld que parte de una bonita idea: proponer a algunos de sus artistas que graben cosas alejadas de su estilo habitual. Esto puede ser evidentemente catastrófico pero también puede dar lugar a cosas tan chulas, pero chulísimas, como el álbum homónimo de Glittering Insects, un trío de Atlanta que se ha tomado tan en serio lo de la libertad que al final uno no sabe bien cómo etiquetarlo. Sus tres componentes tocan juntos en otra banda, GG King, que por lo que oigo ya suena bastante desinhibida y abierta a desviaciones, pero aun así sorprende bastante este míster Hyde que han dejado salir bajo el nombre de Insectos Relucientes.
Supongo que, en principio, nuestros bichillos de hoy también hacen punk, o quizá sea más post-punk, porque la frontera entre ambos nunca ha sido una línea nítida, pero lo contaminan, lo perturban y a veces directamente lo abandonan en exploraciones que, con largos pasajes instrumentales, se acercan al noise rock, el rock progresivo e incluso el black metal. Yo en algunos momentos del disco me he acordado de la obsesión insana de Rudimentary Peni, de la psicodelia demente de Butthole Surfers o del torbellino entre jazz y metal de Aluk Todolo, por citar tres referencias ocasionales. Eso sí, me he visto en mi clásico dilema a la hora de seleccionar una canción: a mí me gustan más cuanto más se les va la olla, y mi pedazo favorito del disco son los casi cinco minutos del tema bautizado también Glittering Insects, un instrumental repetitivo y reptante sin mucha melodía a la que agarrarse, pero tengo la impresión de que en una sección que lleva la palabra canción en el nombre encaja mejor algo como estos Comerciantes en el umbral, de lo más ortodoxamente punk del lote.