Foto: Sean Nicholas Savage
Ya siento que la resaca navideña haya demorado esta selección mensual hasta el día 9, con lo que nos hemos perdido la tercera parte de enero. Claro que tampoco importa tanto si tenemos en cuenta que casi la mitad de los conciertos que he elegido se celebran… ¡el mismo día! Vamos a ello: son nueve citas en nueve recintos diferentes (bueno, en diez, que uno de los artistas hace dos escalas).
Izar & Star: Joxean Artze (día 10, Kafe Antzokia). Por regla general, los conciertos del ciclo Izar & Star me parecen más atractivos cuanto mayor es la distancia entre el artista original y quienes lo van a versionar, así que esta entrega promete una colisión fascinante: el homenajeado es Joxean Artze (el de Ez Dok Amairu y Txoria txori) y los responsables de revisar su legado vienen de la vanguardia y la experimentación. A ver cómo se las apañan Akauzazte, Bas(h)oan, Amorante e Ibon RG.
Pape y Presidente Indio (día 17, Shake!). Cada día soy más devoto de los encuentros underground que acoge el Shake!, tan vivificantes. Esta vez los protagonistas son los pamploneses Pape (que lo más feo que tienen es el nombre, porque suenan como una apisonadora y lucen pedigrí con antecedentes como Kokoshca o Wilhem) y los bilbaínos Presidente Indio (ya saben, Chakravarti Rajagopalachari, Rajendra Prasad, Varahagiri Venkata Giri y Pratibha Patil).
Sumisión City Blues (día 18, Mendigo). Tengo que admitir que no he visto nunca en directo al grupo vitoriano, así que debería aprovechar esta oportunidad, ya que es el último concierto en territorio vizcaíno de su gira de despedida. Pela debe de ser el vocalista más entrenado del panorama, de tanto recorrerse el mundo como vocalista de Marky Ramone, y los Sumisión son ejemplares en su infiltración del espíritu punk a estilos de raíz más clásica. Ah, tocan también Tiparrakers.
Brandy Row (día 19 en Beleza Malandra y día 20 en La Nube). Brandy es un cantante londinense de profusos tatuajes, aire mod y corazón punk que emprende una gira vasca con tres escalas, dos de ellas en Bizkaia. Este texto empieza a parecer una enumeración de mis carencias, pero no les voy a engañar: no conocía de nada a este hombre, pero lo cierto es que sus canciones suenan a clásicos perdidos, capaces de abarcar desde el folk sesentero hasta el rollo arrastrado y decadente de Johnny Thunders.
Rocío Márquez (día 25, Teatro Barakaldo). De Rocío Márquez tengo escuchado su disco del año pasado junto al violagambista Fahmi Alqhai, Diálogo de viejos y nuevos sones, un experimento que enlaza con naturalidad pasmosa y fascinante la música antigua, la canción latinoamericana y el flamenco. No es la única muestra de heterodoxia de la cantaora onubense, pero aquí viene con repertorio clásico, con Manuel Herrera a la guitarra y Los Mellis al compás, y dicen quienes saben de esto que es difícil encontrar un cante con más emoción y conocimiento que el suyo.
Cheetah Chrome y Señor No (día 25, Nave 9). Sesenta y tres añitos tiene ya el señor Eugene Richard O’Connor, un mito del punk americano, primero con los seminales Rocket From The Tombs, después con los Dead Boys y también, qué caramba, hermanado con nuestros Señor No, con los que ya hizo una gira hace unos añitos y se reencuentra ahora. Como dicen ellos, Urte Berri No.
Molly Nilsson (día 25, Alhóndiga). Molly Nilsson, la mujer de la foto de arriba, es una hiperproductiva artista sueca afincada en Berlín que lleva diez años facturando un pop sintético muy personal, libre de las ataduras de las modas. Molly viene a presentar su octavo álbum y, como buena discípula de Juan Palomo, lo hará en solitario, cantando sobre las bases que lleva en su reproductor de cedés. Sí, sí, cedés, esos posavasos que espantan a las palomas.
Empty Files (día 25, Guggenheim). ¡También es el día 25! El cuarto evento destacado de esta fecha tan ajetreada tiene como protagonistas a los locales Empty Files y su rock electrónico, una imponente bestia tentacular que abarca desde el trip hop hasta las asperezas industriales. Su directo sirve como plato fuerte (digo yo) de una nueva edición del ciclo Art After Dark, que se completa con las sesiones de Magda y Hamid.
The Morlocks (día 31, Azkena). The Morlocks proceden originalmente de San Diego, forman parte de aquel revival garajero que insufló rock tozudo a los 80 y tienen una biografía accidentada, con formaciones cambiantes y largas estancias en prisión. De hecho, ahora son un grupo fundamentalmente europeo, desde que el líder Leighton Koizumi se afincó en Alemania. Probablemente, esa trayectoria guadianesca les ha restado reconocimiento, pero sus canciones (incluido su último álbum) son superdisfrutables, sin nada que envidiar a compañeros de generación más famositos. Telonean Los Retumbes.
Vamos con un tema de Brandy Row.