Llevaba mucho tiempo con ganas de dedicar una canción de la semana al quinteto galés Joanna Gruesome, pero siempre se acababa cruzando algo en el camino: Sugarcrush, clara heredera de My Bloody Valentine, estuvo tan a punto que creo que aborté el post cuando ya había empezado a escribirlo. Así que no pienso desperdiciar la ocasión que me brinda Honestly Do Yr Worst, porque me parece una síntesis perfecta de las virtudes del grupo en un minuto y cincuenta y un segundos, que viene a ser un suspiro. Bueno, vale, un suspiro largo. Y cuántas cosas pasan en esos dos minutillos de nada: las guitarras arrancan como si se creyesen en una canción de los Buzzcocks, pero a los doce segundos ya estamos en los dominios del indie pop (con cierto aire valentinero en el juego de las voces masculina y femenina) y de pronto, allá por los cuarenta segundos, se cuela la disonancia y el riff inicial regresa con la cantante Alanna McArdle haciendo de las suyas encima, como en un recordatorio de que algunos miembros de Joanna Gruesome tienen un pasado hardcore.

Honestly Do Yr Worst sirve como adelanto del segundo álbum de Joanna Gruesome (el nombre, por cierto, es un jueguecito de palabras a costa de la pobre Joanna Newsom, con ese gruesome que viene a significar espantoso). El disco, explican, irá más lejos que sus producciones anteriores «en el experimento de combinar pop hipermelódico con violencia sonora». Qué bien.