No cambiamos de década. En realidad, caramba, ni siquiera cambiamos de año: esta Sinfonía del Hobbit es de 1968, como la anterior canción en el horno y también como la siguiente. Se trata de una suite instrumental de cuatro minutos que, como buena sinfonía, consta de varios movimientos, que podríamos bautizar como intro psicodélica, aire […]