¿Se acuerdan de Prince? Sí, sí, Prince, ese tipo al que durante un tiempo hubo que llamar ‘el artista antes conocido como Prince’ y al que, por tanto, podríamos llamar ahora ‘el artista antes conocido como el artista antes conocido como Prince’. Pues bien, nuestro principito de metro y medio se está despachando a gusto estos días contra… ¡Internet! En la campaña de promoción para su nuevo álbum, 20ten, que se regalará con periódicos como el británico Daily Mirror o el belga Het Nieuwsblad, el hombre se muestra convencido de que la red es un concepto caduco, flor de un día que ya pasó: «Internet está completamente acabada», ha dicho. «Es como la MTV. Hubo un tiempo en el que la MTV estaba de moda y de pronto se quedó desfasada. En cualquier caso, todos estos ordenadores y estos dispositivos electrónicos no son buenos: te llenan la cabeza de números y eso no puede ser bueno para ti».

Da un poco de pena, porque con Prince sí que pasó un poco eso: estaba de moda y, de repente, desapareció en un agujero negro de cambios de nombre, conflictos con las discográficas y disolución creativa. En los 80 estuvo en lo más alto y firmó la pasmosa cadena de cuatro álbumes que va de Purple Rain a Sign ‘O’ The Times, pero la mayoría de los aficionados lee su discografía de la última década y media como quien mira un jeroglífico muy raro. Se podía haber puesto él mismo como ejemplo. Pero, mejor que criticarlo, buscaré en mi anticuado internetógrafo un vídeo al que tuve mucho cariño en la remota era de MTV, cuando mi cabeza todavía no estaba echada a perder por tantísimo número.