Lisa Ekdahl es una cantante sueca muy conocida en Escandinavia desde 1994, cuando arrasó con su primer disco, Vem Vet. Lo suyo es jazz-pop, o pop-jazz, un sonido para todos los públicos que explota al máximo las peculiaridades de su voz casi infantil, como si fuese una Billie Holiday feliz e inflada a golosinas y algodón de azúcar. Con una instrumentación mínima pero siempre ingeniosa y resultona, Lisa saca partido a la dulzura y la sencillez en canciones ideales para mañanas soleadas como la de hoy, aunque seguro que a otros les sonarán a noches de luz indirecta y camas deshechas. Este es el tema que da título a su nuevo álbum, Give Me That Slow Knowing Smile (algo así como Dame esa lenta sonrisa de complicidad), interpretado en directo en una tele francesa. A silbar.