¡Ay, qué susto! Ya tenemos a punto de caramelo el estreno de “Cincuenta Sombras más Oscuras” (“Fifty Shades Darker”).
¿Que por qué nos asustamos? Muy fácil, si ya a la triología le falta una escritora que escriba bien, y una historia un poco más creíble y le sobra machismo a raudales, ahora a la película no sabemos, pero intuimos, que le va a sobrar el escritor Niall Leonard, él es el que narrará esta vez la historia.
La escritora, E.L.James, autora de la afamada triología de “Cincuenta Sombras de Grey” ha sustituido a Kellly Marcel y Sam Taylor, por su marido. ¡Vamos, que no se ha cortado un pelo! Tendremos que valorar si el cambio ha sido porque “todo quede en casa”, o si bien el marido tiene dotes.
Al igual que hicieron el año pasado no hay que perder pasta, así que la vuelven a estrenar coincidiendo con San Valentín. ¿El cine se abarrotará de parejas y de chicas,al igual que ocurrió el año pasado?
Pero lo peor de esta trilogía es que hace pensar a las chicas en cuentos de hadas, en ser rescatadas por el príncipe, en este caso un príncipe un tanto retorcido y muy necesitado a su vez de rescate. Y nos preguntamos, ¿de qué habríamos de ser rescatadas las mujeres, y en este caso en concreto Anastasia?
Y la ciencia ficción la encontramos en Anastasia, mujer que según la toca el irresistible Grey ya está húmeda y “abierta” para él. Llega al orgasmo en 5 segundos, dando igual qué maldad y qué dolor le sea afligido. Casi es más creíble Batman u otra película de ciencia ficción.
Pero eso sí, como no hay mal que por bien no venga, de nuevo muchas mujeres fantasearán a ser Anastasia y recuperaran ese deseo perdido o dormido y su escasa o inexistente vida sexual se recuperara momentáneamente. Así qué, ¡que nos quiten lo bailao!