La pareja necesita de mucho mimo y cuidado y aún así la situación no es fácil. La invesrión tiene que ser fuerte. Hoy, después de las vacaciones, tras este período navideño, donde fácilmente se desatan las emociones, tanto las buenas como las malas (que dan lugar a enfados, encontronazos…), vamos a recordar algunos puntos básicos a tener en cuenta:

– La comunicación: comunicarse, hablar, expresar tanto lo bueno como lo malo. Hablar de lo malo no significa estropear nada, ni que nos lleve a un momento malo sino que nos da paso a llegar a lo bueno. Aquello que reprimimos busca el momento y el lugar para salir y normalmente no lo hace en la mejor de las situaciones.

– No es bueno esperar que la otra parte actúe como tú crees que debe de hacerlo. Cada uno tenemos una forma de actuar, diferente. Ya sabéis que los hombres son de Marte y las mujeres de Venus. Dos planetas en los que se actúa de forma totalmente diferente pero realmente queremos llegar al mismo sitio.

– Sexualmente. Terreno muy importante. Hay que invertir en ello. La pasión hay que intentar mantenerla y para ello no debemos de olvidar de estar en contacto con nuestro propio deseo. Hay que cuidarlo porque si éste desaparece la cosa se complica mucho.

– Seduce a tu pareja. Mantén la atracción. No te abandones físicamente. Sentirte bien, siempre ayuda.

– Complicidad: ¡qué gozada es sentir a tu pareja como cómplice! Saber que está ahí, que te va a atender cuando lo necesites.

– Permitir espacios y tiempos libres a la pareja y a un@ mism@. Cuando os reencontréis os vais a coger con más ganas y vais a compartir experiencias.

– No pretender que tu pareja tenga que cubrir todas tus necesidades. Eso es imposible. Le vas a poner el listón muy alto y nunca va a llegar, con lo cual la frustración va a ser importante.

– Ser detallista. Sorprende a tu pareja. No hace falta esperar a una ocasión especial. Haz especial el momento que tú decidas. Y no pienses solo en lo material, hay cosas que no requieren de dinero y producen un beneficio enorme, empezando por una sonrisa, unas palabras amables, piropos, ofrecerse para colaborar en las tareas…