En la pareja el sexo es una parte muy importante que se supone que surge, no vamos a meternos con la frecuencia de cada cual, porque ambas partes lo desean, se gustan, les apetece y lo que se busca es placer, pasarlo bien, sentir a tu pareja en la intimidad… Pero esto corresponde a una parte de las parejas, ya que cuando consultamos sobre cuáles son los motivos que le llevan a una persona a mantener una relación sexual las respuestas son de lo más variopintas.
En las mujeres hay respuestas tan sorprendentes como que,” lo hago para que me ayude en las tareas de casa”. Este es un motivo bastante extendido entre las mujeres porque dicen que así consiguen más fácilmente que sus parejas colaboren en las tareas, ya que de otra manera pedir colaboración significaría entrar en una bronca. Para que veáis, hay por ahí un estudio sobre ello que habla de un porcentaje de hasta un 84% de mujeres han utilizado el sexo para conseguir ayuda en el hogar. ¿Se te ha pasado esto alguna vez por la cabeza o has llegado a utilizarlo? Por favor,si lo has pensado… reprímete.
También están quienes utilizan el sexo para conseguir a cambio nuevos modelitos de ropa, joyas, viajes, caprichos varios… En fin, que hay de todo. Y las parejas, normalmente, lo aceptan ya que por echar un polvo lo que sea. Pero, habría que ir un poco más allá y preguntarse qué es lo que hay por debajo y excavar un poco en lo emocional.
Como os decíamos antes siempre hay un motivo, pero alicientes como: ” tengo ganas, me excita mogollón, me encanta y me lo comería, el sexo es divertido y me encanta hacerlo con él…”, parece que están presentes en pocas mujeres.
Si nos vamos a las motivaciones de los hombres todo parece mucho más simple y sencillo. Sus motivos son que les gusta el sexo, que tienen ganas y punto, más o menos.
La testosterona la verdad es que ayuda bastante y los motivos que hemos señalado antes que utilizan algunas mujeres para el sexo son impensables en los hombres, ¿Verdad? Nosotras entre la educación recibida, los estrógenos y que nuestros compañeros muchas veces no acompañan mucho,… el deseo se nos esfuma como el aire.