¡Uhmmm! Los besos. ¡Cuántos sentimientos (de toda clase) se pueden transmitir a través de un beso: cariño, pasión, amistad, amor, ternura, … en definitiva afecto. Eso que todas las personas necesitamos y a ser posible en grandes cantidades.
Hay mucha gente que se queja porque no le besan, otr@s porque les besan demasiado, que si me deja muchas babas,… Hay de todo, pero un beso es UN BESO, y normalmente, de las personas que quieres, siempre será bienvenido.
El beso se da de diferentes maneras dependiendo del país y de la cultura. Por ejemplo, en zonas de Argentina, Chile y Uruguay se dan besos entre hombres mejilla contra mejilla y estirando los labios. En otros países latinoamericanos el beso entre hombres se considera una actitud de homosexualidad. Y en algunas sociedades aisladas, el beso es muy poco común e, incluso, inexistente.
Lo que sabemos es que los besos producen una sensación de bienestar, ya que en el cerebro se libera una hormona, la oxitocina, que produce placer. Así que a besarse sin problemas y sin límite.
¿Y de dónde viene la costumbre de besarse? ¿Nos hemos besado siempre? ¿Y con la misma intención? El beso aparece como una forma instintiva de demostrar afecto y se da por primera vez de la madre al hijo. Se busca el origen del beso en el impulso de succión del bebé, la costumbre de tribus primitivas de olerse y olfatearse,… También se habla de cuando la mujer de Cromagnon alimentaba a sus crías masticando la comida hasta hacerla puré y luego la pasaba de su boca a la del pequeño.
El significado del beso a lo largo de la historia ha ido variando: está el beso de la codicia y la traición en la Biblia (entre ellos el beso de Judas a Cristo en la mejilla).
Hubo un tiempo en que se solía besar la mano de aquella persona con un nivel más alto; aunque era un beso como muestra de respeto más que de afecto. Y a las damas también, para no faltarles al respeto, se les besaba en la mano.
Dicen que fue en el siglo XVI cuando el beso ya no era sólo una muestra de afecto de madres a hijos sino también entre los adultos. Pasó también a ser una expresión de amor hacia la otra persona. Y, curiosamente, durante la Revolución industrial, quedó prohibido. La gente ya no podía besarse en público.
Ante tal prohibición, en los años 60, la gente se rebeló, y para demostrarlo hacía lo que no se podía: besarse en público.
En otras culturas, como la Celta, se decía que el beso tenía poderes curativos, mientras que en la Edad Media, el caballero que besaba a una dama estaba obligado a casarse con ella.
Desde aquí, como otra de las tantas recomendaciones que os solemos dar, la de hoy está muy clara, besémonos con quien queramos y donde queramos que los besos despiertan los sentimientos. Además podemos utilizar diferentes tipos de besos para diferentes ocasiones: beso seco, beso francés, beso succionador,…