En Occidente; en la época moderna, hemos estamos bajo el influjo y el engaño del mito del amor romántico donde la monogamia es la única forma de vínculo posible entre dos personas. Pero en la última década hay muchos cimientos en torno al amor y a las formas de pareja que se están desmoronando.
Cada día la pareja es más compleja y diversa, la serie norteamericana Modern Family así lo muestra y demuestra.
Y es que la realidad es más compleja de lo que nuestros padres y abuelos vivieron.
Dentro del mito del amor romántico existe la creencia de que solo hay una persona “que te está reservada” para ti. Gracias a Dios a lo largo de la vida te vas a ir encontrando personas afines a ti ¡y menos mal! Que este mundo es muy grande y vete a saber dónde habría ido a caer ese ser destinado para ti y solo para ti.
Otra de las ideas del amor romántico es que cuando encuentres a ese ser el amor que surja entre vosotros por supuesto será eterno. ¡Con lo bien que viven los abogados matrimonialistas!
Y una de las ideas más peligrosas para nosotras, las profesionales de Albora Bide, es que los celos son la prueba inequívoca de nuestro amor y del amor del otro hacia nosotr@s. Quien no siente celos…no ama, y tener celos según el amor romántico no tiene nada que ver con el sentido de la posesión, con la inseguridad personal y la dependencia emocional. ¡Son muestras de todo lo que queremos y nos quieren! ¡Toma ya!
Y es que los mitos suelen llevarnos a cometer errores, simplifican la realidad y nos “adoctrinan” en ideas y valores asociados a esas ideas.
Hay que tener cuidado, con lo que creemos porque a veces es muy peligroso, ¿verdad? Pensar en los celos, a toda la violencia que nos lleva.
Seamos más críticos, seamos más sinceros también, el gusto no acaba, nos fijamos en más de una persona, no a lo largo de la vida, sino a lo largo incluso de la semana, no hay alguien destinado, hay muchos alguienes a nuestro alrededor, y amar es querer lo mejor para el/la otr@, y si lo mejor para él/ella es no estar con nosotr@s…pues bendecid su marcha porque según esa persona ahora es lo mejor para ella.
Un amor maduro es un amor libre, es un amor donde el respeto hacia el/la otr@ está asegurado y donde la dependencia emocional no tiene cabida.