Llega el veranito y con él, las sandalias, las uñas siempre pintaditas a la última moda…y los amantes de los pies redescubren sus deseos más ocultos y los disfrutan.

Si por términos generales la población se decanta por los genitales y los labios, en primer lugar, seguidos por los pechos, para ellos, y los pezones, para ambos, y por último por  el culo, los hay que los pies son el todo para ellos, sin unos pies bonitos , es decir al agrado “de cada consumidor”  serían incapaces de disfrutar del sexo.

El fetiche es necesario para la excitación, sin él no sería posible la correcta excitación sexual.

El fetichista y su fetiche van unidos “para siempre”. El fetiche se convierte en condición sine qua non para su deleite erótico.

Y es que debéis  saber que los pies son ‘sexys’ por la proximidad de sus sensores al de los genitales en la corteza somatosensorial primaria ¡Ahí le es nada! Pero esto aún se discute entre los científicos, algunos apuntan a que la auténtica fuente de la intensidad erógena está en la corteza insular, por su función en la experiencia  subjetiva emocional y su representación en el cuerpo.

Pero sea por el motivo que sea, los pies siguen siendo una zona erógena universal, bien aseaditos chuparlos y…¡seamos egoístas! Que te los chupen…¡es un verdadero placer!, al igual que las caricias en ellos.

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