Como tantas veces decimos, estamos en el siglo XXI, parece que somos una sociedad civilizada, avanzada en pensamiento… pero luego llegan determinadas noticias que nos hacen decir de avanzada, ¡nada! Más bien pudiera ser una noticia que correponde al siglo XVIII.
Os lo contamos porque realmente es algo que a estas alturas, pensar y ver que hay personas que se han quedado ancladas, de mala manera, en no sabemos dónde…
Mirad qué cosas siguen pasando en el mundo. Bueno en el mundo sí, pero en nuestra sociedad, en nuestras vidas no en tierras lejanas. El Ministerio del Interior ha hecho público el informe sobre delitos de odio de 2014 relacionados con la orientación sexual y la identidad de género y los datos hablan de un aumento de estos delitos. El 40% de los delitos de odio están relacionados con la orientación sexual o la identidad de género. De 452 delitos en 2013 a 513 en 2014. De ellos, 401 son mujeres y 112 hombres. Ahí está nuesta sociedad avanzada, tolerante y todos los calificativos que se nos ocurran ponerle.
Y a esto hay que añadirle que entre el 60% y el 90% de las víctimas que sufre alguna agresón de este tipo no lo denuncia con lo cual las cifras reales son mayores.
La Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) asegura que “el perfil de la víctima de homofobia es predominantemente masculino y que los casos de lesbofobia son más reducidos porque las lesbianas están muy invisibilizadas”.
Hacemos un llamamiento a la sensibilidad ciudadana y que cada uno en su foro interno haga la reflexión oportuna.