Si cuando según comienzas una relación sexual  de lo único que te preocupas es de si a ver hoy por fin llegaré o no al orgasmo… ¡Ya empiezas mal!

No llegas, vale, y quieres por supuesto llegar a sentir eso que en boca de los demás suena tan bien, de acuerdo, es normal, pero que sepas que cuanto más te obsesiones, más te preocupes …más lejos estarás de aquello que ansias.

Cuanto más te pongas en la cabeza… menos estarás en tu piel, ¿Cómo vas a llegar al orgasmo si solo estás pensando? Para llegar al orgasmo tienes que estar excitada o excitado, no pensando en… parece que no llego, parece que sí, ahora pierdo la excitación,…

¡Olvídate del orgasmo! Sí, olvídate, no hay mejor truco. ¿Quieres sentirlo? Pues disfruta. ¿Te imaginas ir al monte y solo estar pensando en llegar a la cima, en encumbrar?  Pues que mal. ¿No? No te fijarías en el paisaje por el que vas pasando, no oirías a los animalillos,… Pues eso es lo que te pasa cuando te obsesionas  con llegar a un orgasmo, no disfrutas del camino, no disfrutas de la relación y si haces eso es como querer llegar a la cima sin andar, es decir, querer tener un orgasmo porque sí, sin excitación alguna, ya que si estás pensando en llegar, no estás ¡sintiendo! Aunque parezca difícil de creer, nuestra mente nos juega malas pasadas e incluso nos puede llegar a bloquear sexualmente. Cuando estés en plena acción, olvídate de todo y ponte en la piel.

Y recuerda en el sexo lo más perfecto es lo inperfecto. Sin tener que sentir, sin tener que… ¡nada! Déjate sorprender.

Juega y juega, no olvides los preliminares, cuanto más excitada o excitado estés mejor, porque te lo estarás pasando bien y con eso ya basta, disfruta del camino y no pienses en la meta, el placer por el placer.

Olvídate de tus complejos, si los tienes. Sobre todo las chicas se colocan ahí, en que me va a ver la “morcilla” o el michelín X, y eso nos saca de las sensaciones, nos saca de la piel y nos pone en la cabeza, y ya hemos dicho que donde tenemos que estar es en nuestra piel.

Si quieres fantasea, que los pensamientos que estén en tu cabeza sean eróticos,  como no se puede pensar en dos cosas a la vez… y así aumentarás tu excitación y tu placer…y qué duda cabe que el orgasmo si estás a mil…¡llegará!

¡Ayúdate!: ponte una película erótica, usa un vibrador,…..No te rindas, pero no te agobies